La cantante y compositora Stefani Joanne Angelina Germanotta, más conocida como Lady Gaga, nació en Nueva York, Estados Unidos, un día como este en 1986. Tuvo intención de estudiar arte en la Universidad de Nueva York, y comenzó la carrera, pero la abandonó para dedicarse enteramente a la música.
Gaga alcanzó la fama en 2008 con su primer álbum, “The Fame”. En él están las canciones “Poker Face” y “Just Dance”. Realizó giras por Norteamérica, Europa, Asia y Oceanía y luego lanzó su segundo álbum “Born This Way” (2011).
Su tercer disco, “ARTPOP” salió al mercado en 2013 y habiendo vendido más de 27 millones de discos, Lady Gaga se convirtió en una artista influyente a nivel mundial. Su estilo excéntrico ha llamado la atención en el mundo de la música; sus shows y su extravagante manera de vestir siguen causando controversia y llamando la atención del público y la crítica.
Ganadora de seis premios Grammy y trece MTV Video Music Awards ha sido nombrada artista del año por la revista Billboard en varias ocasiones, y considerada una de las personas más influyentes del mundo por la revista Time.
Fuente: History
Lady Gaga y Bradley Cooper dieron este domingo un recital de complicidad mientras interpretaban a dúo sobre el escenario del Teatro Dolby de Los Ángeles el tema «Shallow» de la película «A Star is Born», Óscar a la mejor canción.
En uno de los momentos más especiales de la velada, los intérpretes de «A Star is Born» trasladaron a la gala de los Óscar la grandísima complicidad de la que ya hicieron gala en la película, lo que fue recompensado por el público con un grandísimo aplauso.
Sin embargo, Lady Gaga y Cooper se olvidaron de todo lo que les rodeaba y solo tuvieron ojos el uno para el otro, con una puesta en escena perfectamente estudiada.
Una complicidad que acabó con ambos actores sentados al piano que tocaba la cantante en los últimos acordes de «Shallow», mejilla contra mejilla, ojos cerrados y una expresión dulce que se metió a los asistentes en el bolsillo.
«Shallow» había comenzado solo con unos acordes de guitarra mientras Cooper y Lady Gaga subían al escenario, desde el patio de butacas, tomados de la mano.
Lady Gaga, que lucía un modelo inspirado en el cine clásico, firmado por Alexander McQueen, en negro y con volumen estructurado en la cintura, se situó de pie junto al piano mientras miraba a Cooper que comenzaba a cantar la canción candidata al Óscar.
Al actor y director en «A Star is Born» le dio el relevo Lady Gaga que, con gestos delicados, se sentó tras un precioso piano en madera clara que relucía bajo los focos del escenario, y con una voz poderosa y aterciopelada centró la mirada de todo el auditorio, pero sus ojos seguían clavados en Cooper.
Una actuación muy dulce que sirvió como celebración anticipada del Óscar a la mejor canción que, unos minutos después, como señalaban todas las quinielas fue a para a «Shallow».
Lady Gaga subió al escenario rodeada del resto de compositores y presa de la emoción no paró de llorar al agradecer este «tremendo honor» y, como no podía ser de otra manera tuvo unas palabras para Cooper: «No hay una personas en el mundo que hubieran podido cantar esta canción como tú».
Aún entre lágrimas la cante recordó que ha trabajado «durante muchísimo tiempo» para lograr todo lo que ha conseguido y es que «no es cuestión de ganar sino de no abandonar», si tienes un sueño «lucha por él, si algo te apasiona da igual cuantas veces te rechacen o te caigas, se trata de seguir adelante y levantarse».
Fuente: EFE
La Academía de las Artes y Ciencias Cinematográficas anunció que las estrellas de «A Star is Born» interpretarán el tema «Shallow» en la presentación de los Oscar 2019.
«Shallow» es el tema principal del filme y está nominado en la categoría de «Mejor Canción Original». Además, la canción ya obtuvo un Globo de Oro y compite por ganar otros cuatro premios Grammy.
El video de la canción muestra escenas del remake de la película de 1937 con Gaga completamente al natural.
La cinta, dirigida por el mismo Cooper, cuenta la historia de un decadente cantante de country que descubre a Ally (Lady Gaga), una talentosa chica a la que busca convertir en una cantante famosa.
Fuente: 24 Horas Chile
Los principales premios serán recibidos este domingo por las mejores obras dramáticas, de comedia y musicales. Eso es lo que le da el toque distintivo a la 76 entrega de los Globos de Oro de este 2019.
La gala se transmitirá en vivo a las 20h00 (hora de Ecuador) por TNT, sin embargo también está disponible online con la app TNT GO.
Las películas favoritas para estos premios son A star is born, por mejor película de drama, mejor actriz (Lady gaga), mejor actor (Bradley Cooper) y mejor canción (Shallow) y otra película musical, Bohemian Rhapsody, protagonizada por Rami Malek que, según algunos criterios, podría ganar el premio como mejor actor.
«A Star is Born», encabezada por Lady Gaga, se perfila como una de las favoritas de los Globos de Oro que se entregan mañana, aunque sin olvidar a «Vice», que lidera con seis nominaciones, ni a «Roma», de Alfonso Cuarón, que opta a tres categorías, entre ellas la de mejor película extranjera.
La 76 edición de los Globos de Oro, que organiza la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood (HFPA), contará, por primera vez, con un premio honorífico a la carrera en la pequeña pantalla, que será otorgado a la leyenda estadounidense Carol Burnett.
La HFPA quiere que esta distinción sea similar al premio Cecil B. DeMille, que cada año se entrega a una gran personalidad del cine y que mañana recibirá el actor estadounidense Jeff Bridges.
«A Star is Born», el debut tras las cámaras de Bradley Cooper, puede llevarse hasta cinco premios: película dramática, director, actriz (Lady Gaga), actor (Cooper) y canción («Shallow»).
La cinta se perfila como favorita según los pronósticos de los analistas en Hollywood recogidos por la web Gold Derby, que la ve como ganadora como mejor película dramática, mejor actriz y mejor canción.
Otro musical que compite también como drama es «Bohemian Rhapsody», el «biopic» del cantante Freddie Mercury.
Completan este apartado «BlacKkKlansman», «If Beale Street Could Talk» y «Black Panther».
Sin embargo, «Vice», sobre la vida del exvicepresidente estadounidense Dick Cheney, es con seis candidaturas la cinta que tiene más nominaciones.
Junto a «Vice» competirán por el galardón al mejor filme de comedia o musical «Green Book», «Mary Poppins Returns», «The Favourite» y «Crazy Rich Asians».
Alfonso Cuarón también podría dejar huella gracias a «Roma», que tras ser aclamada por la crítica podría llevarse el Globo de Oro a mejor película extranjera pero que también logró candidaturas al mejor director y mejor guión que podrían hacer de ella la gran triunfadora de la noche.
El mexicano competirá por el galardón a mejor dirección con Cooper, Peter Farrelly («Green Book»), Spike Lee («BlacKKKlansman») y Adam McKay («Vice»).
«Shoplifters» (Japón), «Capernaum» (Líbano), «Girl» (Bélgica) y «Never Look Away» (Alemania) tratarán de arrebatar a «Roma» el reconocimiento al mejor filme extranjero.
En la categoría de mejor actriz de drama se enfrentarán Glenn Close («The Wife»), Lady Gaga, Nicole Kidman («Destroyer»), Melissa McCarthy («Can You Ever Forgive Me?») y Rosamund Pike («A Private War»).
Y como mejor actor figuran Cooper, Willem Dafoe («At Eternity’s Gate»), Lucas Hedges («Boy Erased»), Rami Malek («Bohemian Rhapsody») y John David Washington («BlacKKKlansman»).
Entre los actores cómicos destaca, en la que puede ser su última interpretación, Robert Redford («The Old Man & The Gun») junto a Christian Bale («Vice»), Lin-Manuel Miranda («Mary Poppins Returns»), Viggo Mortensen («Green Book») y John C. Reilly («Stan and Ollie»).
Y el premio a la mejor interpretación femenina de comedia se decidirá entre Emily Blunt («Mary Poppins Returns»), Olivia Colman («The Favourite»), Elsie Fisher («Eighth Grade»), Charlize Theron («Tully») y Constance Wu («Crazy Rich Asians»).
Por otro lado, este es un año con mucho talento latino en la televisión, ya que el español Antonio Banderas podría llevarse el premio a mejor actor en una serie limitada con «Genius: Picasso», por el que competirá, entre otros, con el hispanoalemán Daniel Brühl («The Alienist»).
Además, la española Penélope Cruz y el venezolano Édgar Ramírez serán candidatos como mejores intérpretes secundarios gracias a «American Crime Story: The Assassination of Gianni Versace», serie que con cuatro candidaturas es la más nominada.
El elevado número de nuevas series candidatas deja grandes incógnitas y pocos favoritos en la pequeña pantalla.
En las series dramáticas, «Killing Eve» y «Homecoming» parecen apuestas sólidas con permiso de «The Americans», «Bodyguard» y «Pose».
Mientras, «The Marvelous Mrs. Maisel» parte con ventaja como mejor serie de comedia o musical, tras su victoria el año pasado, frente a «Barry», «Kidding», «The Good Place» y «The Kominsky Method».
Elisabeth Moss («The Handmaid’s Tale»), que se llevó en 2018 la estatuilla a mejor actriz dramática, se las verá ahora con Caitriona Balfe («Outlander»), Sandra Oh («Killing Eve») Julia Roberts («Homecoming») y Keri Russell («The Americans»).
En el campo masculino aparecen Jason Bateman («Ozark»), Stephan James («Homecoming»), Matthew Rhys («The Americans»), Richard Madden («Bodyguard») y Billy Porter («Pose»).
Rachel Brosnahan, de «The Marvelous Mrs. Maisel», tratará de repetir como mejor actriz cómica ante Kristen Bell («The Good Place»), Candice Bergen («Murphy Brown»), Alison Brie («GLOW») y Debra Messing («Will & Grace»).
Y grandes estrellas se enfrentarán por el reconocimiento al mejor actor de comedia: Sacha Baron Cohen («Who Is America?»), Jim Carrey («Kidding»), Michael Douglas («The Kominsky Method»), Donald Glover («Atlanta») y Bill Hader («Barry»).
Los Globos de Oro, que inauguran la temporada de premios en Hollywood, se celebrarán mañana en el hotel Beverly Hilton de Los Ángeles a partir de las 17.00 hora local (02.00 GMT del lunes) con Sandra Oh y Andy Samberg como presentadores.
Fuente: EFE
El director de ‘A Star is Born’ (‘Ha nacido una estrella’) fue merecedor de un premio honorífico por su carrera y la actriz estadounidense no dudó en subir también al escenario a dedicarle un discurso muy personal. El evento anual de la American Cinematheque se desarrolló el pasado jueves en el Beverly Hilton y este año quien subió a recoger el galardón Sid Grauman fue Bradley Cooper, gracias a su destacada carrera.
Entre sus amigos y todos quienes acudieron a evrle recoger el premio, estaba su compañera de reparto, Lady gaga, quien no pudo contener las lágrimas cuando le dedicó sus palabras. Gaga comenzó agradeciéndole a Cooper no solo por la oportunidad de mejorar como actriz, sino por brindarle su amistad. «Algunas veces me llamas Gaga, pero ambos sabemos que me llamas Stefani». A punto de echarse a llorar la estrella continuó con su discurso: «Huí durante mucho tiempo de Stefani, me puse una capa de superheroína y me llamé a mí misma Lady Gaga. Él me retó a sumergirme hasta el profundo lugar donde la volví a ver, donde tenía que ser Stefani de nuevo»
En ‘A Star is Born’, un éxito romántico, Stefani Joanne Angelina Germanotta, Lady Gaga, interpreta a una joven llamada Ally, que tiene mucho talento pero no ha encontrado la forma de despegar con él. Un buen día conoce a Jackson (Bradley Cooper), una estrella de la música country, alcohólico, que la ayuda a enrumbar su carrera como cantante.
«Estoy tan agradecida contigo, no solo por convertirme en una mejor actriz, sino porque contigo puedo llorar y ser yo misma. Nunca me has juzgado y me respetas como profesional. Gracias por eso». La estrella pop quiso continuar alabando el trabajo de Cooper: «Solo hay un ser humano en el planeta al que me recuerdas y es Tony Bennett. Para mí ese hombre es una leyenda. Nunca he visto a nadie trabajar tan duro hasta que te vi a ti con tu película. Has trabajado durante años y aunque todo el mundo tenga el privilegio de poder ver la película, a mí me gustaría que también pudiesen tener el privilegio que yo tuve».
Jusnto a Gaga se encontraba el actor Sam Elliot, quien se quitó el sombrero y agradeció a Cooper haberle hecho partícipe de su trabajo. «Bradley escribió, dirigió, tocó la guitarra, se convirtió en una estrella de rock, produjo, reunió a todos los actores y a todas las personas tras las cámaras, convenció a Warner Bros», afirmó Elliot. «No conozco a nadie en este negocio que pueda hacer algo así».
Fuente: fotogramas.es
El asalto musicocinematográfico que Lady Gaga acaba de realizar como protagonista de la enésima recreación de «A Star Is Born» es el último de una larga lista de flirteos del cine con las grandes divas de la canción con desiguales resultados, tanto para la vista como para el oído.
Del «remake» de este clásico, con cuatro «remakes» distintos desde que en 1937 Janet Gaynor pusiera voz a la estrella en ciernes de la historia, cabe destacar la que en 1976 realizó Barbra Streisand junto a Kris Kristofferson, con una banda sonora original de la que los críticos solo salvan su romántico tema central, «Evergreen».
Con una sólida carrera tanto en los escenarios como en los platós, la neoyorquina es de las que más se ha prodigado en ambos mundos, con aciertos como «Yentl» (1983), que dirigió, protagonizó y cantó, obteniendo un Óscar de la Academia de Hollywood por su banda sonora merced a «Papa Can You Hear Me?» o «No Matter What Happens».
Madonna no le va a la zaga en número de incursiones desde que en 1985, un año después del torbellino del disco «Like a virgin», intentara remover además las salas de cine con su papel en «Desperately Seeking Susan», para la que cantó «Into the Groove».
Su problema es que la trascendencia musical de esas películas superó siempre con facilidad el de su faceta actoral, como cuando en 1987 regresó con «Who’s That Girl?», interpretando el papel principal tanto en su metraje como en sus canciones, incluida «Who’s that girl», la de «Quién es esa niña, señorita tan fina».
Siguió intentándolo y en 1990 lanzó el álbum «I’m Breathless», inspirándose en el sonido de los años cuarenta en los que se desarrollaba su película «Dick Tracy», trabajos ambos fácilmente olvidables si no fuese porque de allí surgieron «Sooner or Later» (Oscar a la mejor canción) y «Vogue», uno de sus himnos.
Tozuda, en 1996 volvió a aunar cine y música, esta vez en formato musical con uno de los mayores retos de su carrera: asumir el papel de Evita Perón y una compleja partitura de Andrew Lloyd Webber y Tim Rice.
La «ambición rubia» no salió airosa de las críticas por apropiación cultural de un ícono latino, pero sí como cantante con su interpretación de «Don’t Cry for Me Argentina».
Entre medias, otra reina del pop probó suerte con «The Bodyguard» (1992), Whitney Houston, que experimentó un gran éxito de taquilla, rescribió con su impresionante registro vocal el «I Will Always Love You» de Dolly Parton, convirtiéndolo en la balada por antonomasia, e hizo de aquella la banda sonora original más vendida de todos los tiempos, con más hitos como «I Have nothing» o «Run to You».
No le iría igual de bien en incursiones posteriores, aunque musicalmente resulten interesantes tanto «The Preacher’s Wife» (1996), al que pertenece «Step by Step», como «Waiting to Exhale» (1995), cuyo disco reunió a un impresionante ramillete de figuras del r&b, poniendo en sus labios pequeñas joyas como «Exhale (Shoop Shoop)» o «Why Does It Hurt so Bad».
Su único Óscar se lo llevó, sin embargo, por el tema «When You Believe», a dúo con su supuesta gran rival, Mariah Carey, que tardó algún tiempo en dejarse tentar como actriz.
Su debut se produjo con «Glitter» (2001) en plena debacle del 11-S. La película está considerada una de las peores de la historia y el disco, aún vendiendo tres millones de copias, bajó sus estándares comerciales. Solo se salva su versión de «Last Night a DJ Saved My Life».
Otro batacazo cinematográfico importante fue el de «Crossroads» (2002), con Britney Spears como protagonista y cantante de varios temas pop que ya estaban en su exitoso álbum «Britney» (2001).
De altura sí fue «Dancer in the Dark» (2000), atípico musical de Lars Von Trier que se llevó la Palma de Oro en Cannes y el premio a la mejor actriz para Björk en su debut en estas mieles.
Ella misma se ocupó de la composición de la banda sonora, el disco «Selma Songs», que obtuvo una nominación a los Oscar por el tema «I’ve seen it All».
Algunas cintas unieron a más de un talento de la música, como «Dreamgirls» (2006), notable producción cinematográfica inspirada en los vericuetos de la Motown y The Supremes, con Beyoncé y Jennifer Hudson bregando por el foco principal con interpretaciones de aguantarse la lágrima («Listen» en el primer caso y la versión de «I am telling you I’m not going», en el segundo).
No corrió la misma suerte «Burlesque» (2010), lucha de egos intergeneracional entre Christina Aguilera en su primer papel y Cher, que acaba de estrenar la segunda parte de «Mamma Mía».
La aportación masculina a este ámbito llega de la mano de Adam Levine, carismático líder de la banda de pop-rock Maroon 5 y actor primerizo en «Begin Again» (2013), en la que ejerció de divo en toda regla, con cortes como la estupenda «Lost Stars», metáfora de todas esas estrellas que en algún momento se perdieron.
Fuente: EFE
El actor estadounidense Bradley Cooper llegó unos minutos antes de las nueve de la noche (19.00 GMT) a San Sebastián, lo que provocó el delirio entre los cientos de fans que le esperaban después de haber retrasado su llegada varias veces.
Lejos de hacerles desistir, la demora consiguió levantar mayor expectación y que más personas se sumaran a la fiesta mientras coreaban su nombre cuando el intérprete aún no había llegado.
A pesar de los signos evidentes de cansancio por el viaje, el estadounidense, que vestía traje sin corbata, no tuvo inconveniente en acercarse a las vallas tras las cuales se agolpaba el público, para estrechar manos, hacerse fotos y firmar autógrafos.
Cooper dedicó diez minutos a sus seguidores y saludó incluso, algo bastante inusual, a los fans de las últimas filas para satisfacción de todos ellos.
El actor de «The Hangover», cuatro veces nominado a los premios Óscar, presenta mañana en el 66 Zinemaldia, su último trabajo, «A Star is Born» en la sección Perlas, que recoge películas estrenadas en otros festivales.
La película, cuarta versión de la mítica de 1954, dirigida por George Cukor, es un proyecto personal que produce, dirige y protagoniza con la cantante y «showoman» Lady Gaga en su primer papel protagonista en cine tras sus notables apariciones en la serie «American Horror Story».
Fuente: EFE
Los caminos del éxito pueden ser imprevisibles y así lo plasman Bradley Cooper y Lady Gaga en «A Star is born», la adaptación de un clásico imperecedero con música, amor y mitos caídos que hoy obtuvo el aplauso de la Mostra de Venecia.
La cinta, proyectada fuera de concurso, ha sido un reto para ambos pues, en primer lugar, supone el estreno como director de Cooper, que también la coprotagoniza en el papel de un exitoso rockero de Arizona con variadas adicciones y traumas.
«Tengo 43 años y creo que el tiempo es la moneda más importante. Quiero utilizarla de la mejor modo posible. Cada minuto y cada segundo invertido en esta película ha valido la pena», señaló Cooper en la presentación, en la que aclaró su deseo de seguir dirigiendo.
Pero también ha sido un hito para la camaleónica neoyorquina ya que este es su primer papel protagonista en el cine, tras sus cameos en «Machete Kills» (2013) y «Sin City» (2014), su participación en la serie «American Horror Story: Hotel» y su reciente documental «Five Foot Two» (2017).
Gaga explicó que siempre había deseado trabajar como actriz y con Cooper ha cumplido un sueño: «En la sala puede haber cien personas y que 99 no crean en ti. Pero solo se necesita una para lograr un objetivo», celebró con miradas de complicidad hacia su colega.
«A Star Is born» es una historia de amor perenne desde su estreno en 1937, pues ya suma cuatro versiones con la de Bradley Cooper, inspirada especialmente en la última, un recordado musical de 1976 con Barbara Streisand y Kris Kristofferson.
En esta última revisión Gaga, una de las cantante más influyentes del pop en la última década, se despoja de pelucas y maquillajes para hacer de Ally, una camarera con impresionantes dotes vocales que un día conoce y se enamora del rockero Jackson Maine (Cooper).
En ese momento comienza una trayectoria de ida y vuelta: mientras ella prospera ante los micrófonos, él pasa de llenar conciertos a emprender un inclinado descenso a los infiernos del alcoholismo, lo que pone en jaque la romántica relación sentimental que mantienen.
La obra presenta una lograda banda sonora con temas interpretados por Lady Gaga, quien da su mejor versión como diva del pop y también con el rock, el soul o la balada, e incluso un Cooper, de voz ronca, se pone ante el micrófono en el Festival inglés de Glastonbury.
De hecho, algunos de los espectáculos en los que Cooper y Gaga comparten escenario durante la cinta fueron en directo ante público, ante lo que el actor aseguró haberse sentido bien junto a la diva.
«Es verdaderamente un buen cantante», opinó la artista.
En definitiva se produjo un «gran intercambio» de papeles en el que la autora de «Bad Romance» instruyó al actor a la hora de cantar y este, a su vez, la ayudó con claves de interpretación: «Ha sido una experiencia fantástica», resumió el último.
Cooper consideró la importancia de ver a una «súper estrella» en su primer papel en cine: «Yo siempre he creído en ella», señaló.
Por su parte, Lady Gaga, alejada de su estrambótica estética del pasado, señaló que ponerse ante la cámara hizo que emergieran toda su «vulnerabilidad», en primer lugar por la exigencia del director novato de evitar todo tipo de maquillajes y de verla natural.
«Forma parte de mi música convertirme en personajes diferentes, pero Bradley me quería sin maquillaje y un día en mi casa, bajando las escaleras, me le encontré con desmaquillador (…) Es un nuevo rostro que ha descubierto en mí y una nueva vulnerabilidad», apuntó.
En el fondo todo gira en torno a la fama, cómo no tratándose de dos estrellas, y Cooper así lo ha querido demostrar con el a menudo atronador sonido de la cinta pues, explicó soplando su micrófono, «la fama es mucho ruido y después silencio».
Pero también trata sobre el amor, el desamor, la complicidad, el sinuoso camino de la popularidad y las adicciones: «una historia que implicará a las personas de todo el mundo», prometió la ahora actriz.
Fuente: EFE y Warner Bros. UK