En el marco de la tercera ronda de negociaciones que adelantan el gobierno y la oposición de Venezuela en la isla caribeña de Barbados, se acordó el jueves la instalación de una mesa para llegar una solución a la crisis.
El anuncio fue hecho por el gobierno noruego, que indicó en un comunicado que la mesa tendrá como fin llegar a una “solución acordada y el marco de las posibilidades que ofrece la constitución”. En el escrito se señala que las partes “continúan la negociación” iniciada en Oslo en mayo pasado, sin ofrecer mayores detalles. También se subraya la importancia de que las partes “tomen la máxima precaución en sus comentarios y declaraciones” sobre el proceso.
Los delegados del gobierno y la oposición retomaron esta semana en Barbados el proceso de negociaciones que estuvo suspendido por semanas. Los representantes de ambas partes reiniciarán las conversaciones nuevamente el domingo para proseguir las negociaciones que se estiman han avanzado, indicaron a The Associated Press fuentes del gobierno y la oposición.
En común se decidió dejar el espinoso tema de la elección hasta el final de las conversaciones, precisó una fuente.
En un acto de gobierno televisado el jueves, Nicolás Maduro se mostró complacido de que la mesa de diálogo “existe, está activa” y “funcionando”.
Explicó a sus seguidores que “no se puede decir todo” debido al compromiso asumido con Noruega y la delegación opositora de “llevar con prudencia” los temas que se conversan, “pero hay que decir algo”, asevero Maduro, destacando que entre lunes y miércoles en la isla caribeña se abordó en parte la agenda de seis puntos “consensuados” que incluye temas políticos, sociales y económicos, sin dar otros detalles.
Acto seguido, le dio la palabra al gobernador del estado central de Miranda, Héctor Rodríguez, uno de los delegados del gobierno en las reuniones, quien advirtió a los venezolanos que “este no va a ser un camino sencillo, va a ser un camino complejo que va a ameritar mucho trabajo”.
“Sin embargo, como le decía, tengo la percepción de que las y los venezolanos y las partes políticas del país podemos llegar a un acuerdo de convivencia democrática en el país, podemos llegar a un acuerdo de paz, de gobernabilidad”, añadió Rodríguez dirigiéndose a Maduro .
Maduro ha instado a los opositores a que “no se dejen engañar” sobre la agenda del diálogo, y sostuvo que entre los sectores adversos a su gobierno hay “grandes contradicciones”.
El representante opositor en las negociaciones, Stalin González, indicó el jueves en un mensaje que difundió en su cuenta de Twitter que la delegación opositora “hará consultas para avanzar y poner fin al sufrimiento de los venezolanos”, pero no ofreció detalles.
Ante las versiones de prensa que surgieron esta semana de que en Barbados se estaría discutiendo la realización de elecciones presidenciales, el jefe de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, descartó la víspera esa opción y dijo que Maduro le quedan cinco años.
Por su parte, el líder opositor Juan Guaidó ha insistido en que la oposición trabajará en todos los tableros, que incluyen la iniciativa de Oslo y el retorno de Venezuela al Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, para lograr una pronta salida a la profunda crisis que ha desatado la migración de más de cuatro millones de venezolanos.
Guaidó, quien ha sido reconocido como presidente interino de Venezuela por más de medio centenar de países, ha planteado que independientemente del mecanismo al que se llegue la oposición seguirá trabajando en los objetivos que se propuso a inicios de año del cese del mandato de Maduro, el establecimiento de un gobierno de transición y nuevas elecciones presidenciales.
La oposición sostiene que Maduro está “usurpando” el cargo desde enero tras ser reelecto el año pasado en unos comicios en los que asegura que hubo un “fraude”. Estados Unidos y varios gobiernos de la región y Europa también objetaron la reelección del mandatario.
Las partes viajaron entre mayo y junio en dos oportunidades a Noruega para tratar de avanzar hacia una negociación que permita el inicio de un diálogo que abra una salida pacífica a la crisis venezolana.
Entre 2016 y 2018 el gobierno y la oposición participaron en varias iniciativas de diálogo, con el apoyo de varios países y el Vaticano, que no llegaron a ningún acuerdo y terminaron por profundizar los enfrentamientos entre las partes./AP
El exalcalde de Caracas Antonio Ledezma, junto a otros reconocidos opositores venezolanos, será recibido hoy por el canciller brasileño, Ernesto Araújo, y otros miembros del Gobierno del presidente Jair Bolsonaro.
«Tendremos una reunión de trabajo durante todo el día», tanto con el canciller Araújo como con otros representantes del Ministerio de Relaciones Exteriores y de otros organismos del Gobierno, explicó a Efe Ledezma poco después de llegar a la capital brasileña.
El exalcalde de Caracas, en el exilio desde fines de 2017, cuando huyó de Venezuela tras permanecer detenido durante 1.002 días, llegó a Brasilia junto al diputado y expresidente de la Asamblea Nacional Julio Borges y el dirigente del partido Voluntad Popular Carlos Vecchio.
Los tres dirigentes de la oposición han apoyado la decisión de la Asamblea Nacional de declarar «ilegítimo» al Gobierno de Nicolás Maduro y han declarado su respaldo a que el actual presidente del organismo legislativo, Juan Guaidó, le sustituya en el poder.
Esa posición ha sido refrendada también por Brasil, que junto con los miembros del Grupo de Lima, un mecanismo político que reúne a 14 países americanos, aprobó, con la sola excepción de México, que no reconoce la legitimidad del nuevo mandato que Maduro inició el 10 de enero pasado. EFE
La dividida oposición venezolana definirá el jueves si acude a las elecciones presidenciales de abril con un candidato único o desiste de participar en los comicios, anunciaron el jueves dos de sus dirigentes.
La decisión de las autoridades de fijar para el 22 de abril las elecciones sepultó la posibilidad de un acuerdo entre el gobierno y la oposición que era promovido por la comunidad internacional como una salida a la crisis política y económica del país que amenaza con agravarse por el eventual endurecimiento de las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea. A su vez, la Corte Penal Internacional anunció el jueves la apertura de una investigación preliminar sobre supuestos crímenes cometidos por la policía y las fuerzas de seguridad en 2017, proceso que de avanzar podría perjudicar la imagen del gobierno de Nicolás Maduro.
El jefe de la delegación opositora, el diputado Julio Borges, indicó que los partidos se reunirán durante la jornada para definir la postura que asumirán. Borges dijo a la radio local Éxitos que desde su percepción la oposición debe decidir entre “cerrarse completamente” ante la postura del gobierno de imponer los tiempos, reglas y procedimientos para las elecciones o inscribir un candidato unitario que represente un “frente amplio”.
Por su parte Andrés Velásquez, dirigente del partido Causa R, dijo a The Associated Press que su organización llevará a la reunión la propuesta de “no avalar las elecciones” acordadas por el Consejo Nacional Electoral (CNE) -controlado por el oficialismo-, alegando que en el proceso se cometió un “fraude a la constitución y un fraude a las leyes electorales”.
La dirigencia opositora apuesta a que la alianza de partidos logrará definir una posición de consenso, pero algunos analistas tienen dudas de que puedan sobreponerse a las fracturas para enfrentar a Maduro, quien pesar de que su popularidad se ha visto golpeada por la crisis figura como favorito para ganar los comicios y gobernar por otros seis años.
El consultor político Luis Salamanca dijo a AP que la oposición está en la “peor situación posible” porque tiene un limitado tiempo para decidir y lograr superar sus divisiones. “El dilema es si participa en unas elecciones sin condiciones”, sostuvo.
La coalición Mesa de la Unidad Democrática -integrada por una veintena de partidos- entró a mediados del año pasado en una crisis luego del fracaso de las protestas que impulsó la oposición para presionar la salida de Maduro del gobierno y la instalación en agosto de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente.
Las fracturas se hicieron evidentes luego de que algunos dirigentes se mostraron dispuestos a reconocer la Constituyente y retomar el diálogo con el gobierno mientras otros llamaron a desconocer la nueva institución y mantener las manifestaciones callejeras.
Las negociaciones entre el gobierno y la oposición, que se venían adelantando desde diciembre en República Dominicana, entraron la víspera en un “receso indefinido” luego de que no se logró definir de mutuo acuerdo una fecha para las elecciones presidenciales, indicó el presidente de República Dominicana, Danilo Medina, uno de los facilitadores del proceso.
Las partes habían discutido la posibilidad de realizar las elecciones el 22 de abril, pero luego la coalición opositora descartó esa opción y propuso que la consulta debía hacerse a mediados de año con un nuevo CNE y con observadores internacionales independientes apoyados por Naciones Unidas.
Los representantes del gobierno aceptaron la selección por consenso de dos de los directores del CNE y la conformación de una misión de observación electoral internacional como parte de las garantías electorales pero mantuvo la fecha el 22 de abril para los comicios, señaló el texto del fallido acuerdo que difundió el Ministerio de Comunicación.
En medio del fracaso de las negociaciones, Maduro dijo el jueves que su gobierno está abierto a dar “todas las garantías necesarias y recibir a todos los observadores internacionales” que quieran venir a Venezuela. “Más que a inspeccionar podrán aprender del impecable sistema electoral que hemos construido”, indicó el mandatario en un mensaje de su cuenta en Twitter.
Los mandatarios de Estados Unidos, Donald Trump, y de Guatemala, Jimmy Morales, acordaron el jueves en Washington trabajar juntos para “restaurar la democracia” en Venezuela. En tanto, el Departamento de Estado rechazó en un comunicado la decisión del CNE de convocar elecciones para el 22 de abril y señaló al gobierno de Maduro de continuar en su posición de “desmantelar la democracia” y no permitir un acuerdo para lograr que los comicios sean creíbles.
Este 29 de enero es una nueva oportunidad para que el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición de Venezuela alcancen un acuerdo que logre calmar la crisis económica, social y política en la nación suramericana.
El encuentro que tiene lugar en República Dominicana se produce en medio de tensiones avivadas tras la orden de la Constituyente de adelantar las elecciones presidenciales para antes del 30 de abril, y luego de que el máximo tribunal del país excluyera la tarjeta de la alianza opositora (Mesa de la Unidad Democrática) de las elecciones.
Sin embargo, para el Presidente Maduro está todo listo para firmar un acuerdo con sus adversarios.
“El gobierno de Venezuela está listo para firmar el acuerdo con la oposición venezolana para la convivencia, el diálogo permanente, la paz y la democracia. Espero que la delegación de la oposición tenga capacidad de diálogo, entendimiento (…) yo estoy listo”
El partido de Leopoldo López, Voluntad Popular, se levantó de la mesa de negociaciones denunciando incumplimiento del gobierno.
Otros partidos políticos que continúan aferrados a la mesa, como Acción Democrática y Primero Justicia, intentaban este fin de semana validarse nuevamente ante el Consejo Nacional Electoral.
Juan Requesen parlamentario de oposición se quejó de que “el gobierno establece una validación ilegal de partidos políticos, luego te convocan una elección presidencial sin ninguna condición electoral».
«Hay gente que debemos participar y otras que no, hoy no hay una condición sin que el gobierno vuelva a cometer fraude”, señaló.
La oposición aún no define si ira o no a las elecciones presidenciales, y mucho menos ha informado quién será el candidato que competirá con el del gobierno./VOA
El régimen de Nicolás Maduro y la oposición de Venezuela continúan este viernes en la capital dominicana el diálogo tras las negociaciones celebradas a inicios de este mes que concluyeron con avances, aunque no se anunció ningún acuerdo.
El canciller dominicano, Miguel Vargas, afirmó que todo está listo para que las negociaciones culminen «con una solución democrática, pacífica y estable a las divergencias existentes entre el Gobierno y la oposición de ese país».
«En nombre del Gobierno dominicano, del presidente Danilo Medina y del mío propio valoramos la confianza que han depositado en nosotros las partes, al escogernos como árbitros para zanjar sus diferencias», añadió.
Al término de las reuniones celebradas los pasados 1 y 2 de diciembre, el presidente dominicano, Danilo Medina, anfitrión del diálogo, destacó que se avanzó «en profundidad» sobre los seis puntos de la agenda, y dijo que ambas partes se volverían a reunir el 15 de diciembre con el objetivo «de lograr un acuerdo definitivo»
Desde Caracas se informó que el diputado Luis Florido, uno de los negociadores de la oposición en el diálogo político, dijo que existe la posibilidad de que «se concreten unos acuerdos» este viernes «pero también hay una posibilidad de que no haya acuerdos».
«Lo que sí tiene que tener claro el pueblo venezolano es que nosotros no vamos a firmar un mal acuerdo ni un acuerdo que perjudique a los venezolanos», añadió.
A este diálogo -al que se oponen líderes opositores como María Corina Machado o Antonio Ledezma- acuden los partidos con más diputados de la oposición venezolana, con la esperanza de lograr garantías electorales de cara a los comicios presidenciales previstos para 2018.
También solicitan la apertura de un canal humanitario que permita el envío de medicinas y alimentos, un cambio en la composición del Consejo Electoral, la liberación de los encarcelados que consideran «presos políticos» y la restitución de unos poderes constitucionales de los que fue despojado el Parlamento.
Por su parte, el Gobierno de Nicolás Maduro pide el levantamiento de las sanciones económicas que pesan sobre algunos de sus funcionarios y portavoces oficialistas ya han señalado que no aceptarán un canal humanitario o un cambio de integrantes del Poder Electoral.
Chile y México son los países observadores del diálogo a instancia de la oposición, mientras que Bolivia y Nicaragua y San Vicente y Granadinas son los invitados por el Gobierno de Nicolás Maduro.
Fuente: Infobae.com
En el marco de las elecciones municipales de este domingo, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, advirtió que los principales partidos de la oposición tendrán prohibido presentarse a los comicios presidenciales del próximo año.
«Los demás partidos, Voluntad Popular (VP) y Primero Justicia (PJ) han desaparecido del mapa político venezolano y hoy desaparecen totalmente porque partido que no haya participado hoy y haya llamado al boicot de las elecciones no puede participar más», adelantó el mandatario chavista después de votar en las municipales.
VP, PJ y Acción Democrática (AD) no han acudido a estos comicios tras denunciar casos de fraude y numerosas irregularidades en las elecciones regionales del 15 de octubre, en las que el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) de Maduro ganó 18 de las 23 gobernaciones según los resultados oficiales.
Estas formaciones están entre los cuatro grandes partidos de la oposición venezolana, tres de los cuales no participan en los comicios de hoy al no confiar en un Consejo Nacional Electoral (CNE) al que acusan de favorecer sistemáticamente al régimen chavista.
Maduro señaló que la Asamblea Nacional Constituyente decidió que los partidos que llamaran al boicot de las municipales no participarían en los siguientes comicios y él, como jefe de Estado, apoya este mandato.
«No podrán participar», anticipó Maduro, cuyo primer mandato termina el año que viene, cuando deben celebrarse elecciones presidenciales.
Uno de los principales dirigentes opositores de Venezuela, el diputado Freddy Guevara, se ha refugiado en la residencia del embajador de Chile después de que el Tribunal Supremo de Justicia ordenara levantarle la inmunidad parlamentaria.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile dijo el sábado por la noche en un comunicado que Santiago a ha otorgado a Guevara, primer vicepresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, “la calidad de huésped de nuestra embajada”.
“Ante lo que estima inminentes amenazas a su seguridad e integridad personal, ha solicitado la protección de Chile”, afirmó la cancillería en referencia al legislador.
Guevara entró a la residencia del embajador en Caracas con su novia, terminando con más de 24 horas de suspenso en las que se escondió. Vehículos de la policía de inteligencia Sebin habían rodeado su residencia.
El viernes, el Tribunal Superior de Justicia de Venezuela prohibió a Guevara abandonar el país y solicitó a la Asamblea Constituyente cancelarle la inmunidad con vistas a un posible arresto y juicio posterior. El tribunal acusó a Guevara de instigar la agitación y de otros delitos por las protestas antigubernamentales que encabezó durante meses este año.
Según la ley, compete a la Asamblea Nacional controlada por la oposición determinar si se cancela la inmunidad parlamentaria a un legislador. Sin embargo, el Tribunal remitió el caso a la Asamblea Constituyente, que está llena de simpatizantes del gobierno y tiene facultades prácticamente ilimitadas.
Guevara, vicepresidente del Congreso, estuvo a la vanguardia de las protestas de la oposición que movilizaron a cientos de miles de venezolanos frustrados con la espiral de crisis política y económica de su nación.
Su partido Voluntad Popular calificó las acusaciones de delitos inexistentes “inventados por la dictadura”. El sábado, 12 gobiernos del Hemisferio Occidental _entre ellos México, Brasil y Canadá_ emitieron una declaración conjunta en la que dijeron que el ataque a Guevara por parte de la Corte Suprema fue nuevo golpe al Estado de Derecho y a la separación de poderes en Venezuela.
No hubo reacción inmediata del gobierno, pero un drama diplomático similar que involucra a Chile se desató a principios de año, cuando cinco juristas designados por la Asamblea Nacional para reemplazar a los leales del gobierno en el Tribunal Superior de Justicia solicitaron asilo en la residencia del embajador Pedro Ramírez después de que se ordenara su arresto.
El gobierno consideró a los juristas usurpadores y nunca les concedió un salvoconducto seguro para exiliarse en Chile. Después de más de dos meses de estancamiento dejaron la residencia por voluntad propia el mes pasado y fueron transportados secretamente a través de la frontera con Colombia y desde allí volaron a Santiago./AP
El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela ordenó retirar la inmunidad parlamentaria al líder opositor Freddy Guevara, vicepresidente de la Asamblea Nacional, y determinó que será juzgado por la justicia ordinaria.
Según el comunicado de prensa del tribunal, Guevara incurrió en los delitos de asociación, instigación pública continuada y uso de adolescente para delinquir. Además, le prohibió al líder opositor salir del país. El TSJ también ordenó enviar copias a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) para solicitar que se le levante la inmunidad.
El Gobierno considera que Guevara «formó parte del grupo de actores que hicieron lobby este año ante agentes internacionales para alentar la intervención contra Venezuela», como lo reportó el medio oficial Venezolana de Televisión.
La Asamblea Nacional reaccionó diciendo que desconoce cualquier acto del Tribunal Supremo de Justicia y de la ANC que «pretenda vulnerar nuestra Constitución y los derechos consagrados en la misma». Según el organismo, la determinación del tribunal va en contra de la Constitución y le vulnera el derecho al debido proceso de Guevara, «al privarlo del derecho a un antejuicio de mérito, con derecho a la defensa, y ha desconocido su inmunidad parlamentaria, que solo puede ser allanada por la Asamblea Nacional». De hecho, insistió en que esa es «la única institución legitimada por el pueblo» para decidir sobre la anulación o no de la inmunidad.
También advirtió que aplicará «acciones tanto nacionales como internacionales en procura del restablecimiento del orden constitucional y democrático infringido». Y aseguró que la sentencia del TSJ es un acto de persecución política.
La Mesa de Unidad Democrática, que reúne a la oposición del país, rechazó la decisión y aseguró que era ilegal. Calificó los delitos de «inventados por el régimen sin ningún tipo de sustento ni validez legal». También sostuvo que esta acción «constituye una violación absoluta e inaceptable de sus derechos como ciudadano y demócrata». Además, expresó su «total» respaldo y solidaridad.
Fuente: Infobae.com
El gobierno venezolano liberó a dos activistas de oposición presos desde hace más de un año, uno de ellos ciudadano español, a medida que el presidente Nicolás Maduro busca aliviar la presión internacional luego de meses de conflicto.
Los opositores venezolanos Yon Goicoechea y Delson Guárate salieron este viernes en la noche de prisión con medidas cautelares, informaron fuentes de la tolda política Voluntad Popular(VP), en la que militan ambos dirigentes.
La agencia policial Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) los mantenía presos sin juicio. Las autoridades habían ordenado la libertad de Goicochea, que obtuvo la ciudadanía española estando en prisión, hace más de un año.
El gobierno de Maduro ha liberado gradualmente a los opositores desde que consolidó su poder tras la elección de una asamblea constituyente en julio.
Según Foro Penal, quedan en Venezuela 360 presos políticos, comparado con 676 en el auge de las protestas contra la asamblea constituyente./AP
Cuatro de los cinco gobernadores opositores electos en los comicios del 15 de octubre se juramentaron el lunes ante la Asamblea Constituyente, integrada en su totalidad por oficialistas, pese a considerar que esa instancia legislativa es inconstitucional.
Los cuatro miembros de la oposición pertenecen al partido Acción Democrática y la noticia de su juramentación fue confirmada a través de Twitter por Delcy Rodríguez, excanciller y actual presidenta de la Constituyente.
Hasta ahora el único faltante es el gobernador electo del estado Zulia, precisó Rodríguez.
La Mesa de la Unidad Democrática, alianza integrada por casi tres decenas de partidos opositores, había repetido que sus nuevos gobernadores no prestarían juramento ante la Constituyente debido a su carácter ilegítimo, pero antes de las elecciones el presidente Nicolás Maduro advirtió que quienes resultaran vencedores debían subordinarse ante este organismo para poder asumir sus cargos. De no hacerlo, sugirió el mandatario, los puestos podrían quedar vacantes y se convocaría a nuevas elecciones en los estados que lo requirieran.
Las leyes venezolanas además contemplan una juramentación ante la Asamblea Legislativa de cada estado.
Según algunos opositores, la decisión de acatar lo dicho por Maduro obedece a un deseo por resolver la crisis que oprime al país sudamericano.
“La humillación de un líder es un medio para lograr Libertad”, escribió la gobernadora opositora del estado Táchira, Laidy Gómez, en su cuenta de Twitter.
Por su parte, el gobernador electo del estado Anzoátegui, Antonio Barreto Sira, afirmó a través del mismo medio que haría “el mayor de los sacrificios” para tratar de solventar la crisis. “Que nadie se confunda: hemos dado todo por Anzoátegui y por nuestro pueblo vamos a darlo todo”, indicó.
Los otros dos gobernadores opositores, Alfredo Díaz, del estado insular de Nueva Esparta, y Ramón Guevara, del estado andino de Mérida, no se pronunciaron de inmediato, pero Juan Pablo Guanipa, electo en el estado Zulia y faltante en la ceremonia de hoy, manifestó en una rueda de prensa que no se juramentaría ante la “fraudulenta” Constituyente.
Guanipa no fue el único que rechazó la situación. Más tarde, Armando Armas, diputado de la Asamblea Nacional controlada por la oposición, escribió en Twitter que como “demócrata, como venezolano, me siento profundamente indignado y traicionado” y añadió que parece que es momento de que surja una nueva alianza en la que “se quedarán por fuera quienes han claudicado ante la dictadura”.
Tras resaltar que los cuatro gobernadores opositores “han reconocido los poderes” de la Constituyente, Maduro comentó que conversó telefónicamente con cada uno de ellos para invitarlos a trabajar juntos. “Espero la mejor buena voluntad”, dijo el mandatario horas después durante un encuentro con los 18 gobernadores oficialistas en el palacio de gobierno.
Maduro además anunció que designará a cinco de sus más cercanos colaboradores –incluidos los gobernadores salientes de los estados Zulia y Nueva Esparta– como “protectores de los estados” en los que la oposición salió victoriosa.
La figura del “protector” fue creada originalmente cuando el excandidato presidencial opositor Henrique Capriles ganó en 2012 la reelección como gobernador del estado Miranda.
Aunque la oposición sólo obtuvo cinco de 23 gobernaciones, encuestas previas a los comicios indicaban que era favorita para obtener mayoría. Por ello, ha disputado los resultados y ha dicho que tiene evidencias de una posible manipulación de las urnas.
La Constituyente fue integrada en julio después de una elección en la que la oposición se negó a participar. Desde que se instaló el 4 de agosto, sus integrantes no han dejado lugar a dudas de que sus poderes son virtualmente ilimitados y que están dispuestos a emplearlos.
Decenas de gobiernos extranjeros —entre ellos Estados Unidos, Canadá Francia y varios latinoamericanos— se han mostrado críticos ante la situación./AP
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, amenazó con repetir las elecciones regionales en los estados donde no se reconozca a la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), en referencia a los cinco gobernadores opositores electos que se han negado a juramentarse ante este poder plenipotenciario.
«El que quiera ser gobernador tendrá que reconocer la Asamblea Nacional Constituyente si no, se repetirán elecciones en los estados donde no se reconozca la Asamblea Constituyente, se repetirán elecciones», dijo Maduro en cadena obligatoria de radio y televisión.
El jefe de Estado venezolano dijo además que en caso de repetirse las elecciones «quedarán inhabilitados los candidatos que aunque ganaron no quisieron respetar la ley y la Constitución».
El pasado domingo, según el Consejo Nacional Electoral, el chavismo ganó en 18 estados y la oposición en 5, en los comicios regionales para escoger a los gobernadores.
Los gobernadores recién electos en Venezuela debían participar en una ceremonia ante la Asamblea Nacional Constituyente, un cuerpo plenipotenciario conformado por aliados del Gobierno, pero los candidatos opositores que ganaron cinco de los 23 territorios en disputa no acudieron al acto.
Solo los 18 ganadores del partido oficialista juraron en la semana ante la asamblea constituyente, en medio de denuncias de la oposición de fraude y desconocimiento de los resultados de los comicios del domingo.
La oposición dijo que denunciará en instancias internacionales lo que acusa es un fraude en las elecciones de gobernadores y dice tener pruebas de cómo el árbitro electoral alteró los resultados horas después de cerrada la votación, sin permitir el acceso a sus testigos, en al menos uno de los estados.
Fuente: VOA/Infobae.com