Afectación cerebral, otro daño colateral en pacientes con COVID-19

 La neumonía es una de las principales complicaciones de la COVID-19 pero, aunque es considerada una afección respiratoria, el SARS-CoV-2 también tiene otras complicaciones asociadas como al afectación cerebral.

La variedad de afectaciones se ha ampliado desde la aparición del virus. Mientras que en los casos más leves puede generar dolor de cabeza, algunos tienen pérdida del olfato o el gusto parcial o permanente.

Pero en los casos más graves, los pacientes pueden llegar al infarto cerebral y morir.

El doctor Arturo Ayala Arcipreste, encargado del servicio de neurocirugía del Hospital Juárez de México, explicó este lunes que, si bien el virus afecta principalmente al sistema respiratorio, su mecanismo de afección incluye otras áreas como el cerebro.

Esto sucede, detalló, porque este es el tejido del cuerpo que consume casi el 20 % del oxígeno que respira el ser humano «y si tenemos un problema ventilatorio que afecta la adecuada oxigenación, el cerebro se va a afectar».

El especialista explicó que el coronavirus puede provocar que la circulación sanguínea se vea afectada precisamente por esta falta de oxigenación.

Esto provoca que se formen coágulos y, en aproximadamente el 80 % de los casos graves en donde se presenta el infarto cerebral, deriva en la muerte.

«En los pacientes graves, cuando llegan a tener infarto cerebral, el índice de mortalidad es muy alto», lamentó el experto.

SECUELAS NEUROLÓGICAS DEL COVID-19

El virus, según se ha comprobado con la experiencia internacional, produce una reacción sistémica hiperinflamatoria grave. Es decir, existen inflamaciones en todo el cuerpo.

Esta reacción del organismo, explicó el neurólogo, puede provocar daños en el sistema nervioso central y provocar daños neurológicos que tengan secuelas irreversibles.

«Queda con secuelas neurológicas importantes, que no puedan mover el cuerpo o no puedan hablar», puntualizó.

En muchos pacientes que padecen el coronavirus es muy llamativa la pérdida de olfato y/o del gusto e incluso este parece ser un síntoma temprano de estar contagiado.

Ayala Arcipreste considera que esta podría ser la variante más leve de la COVID-19.

Sin embargo, aceptó que este puede ser un daño neurológico el cual se produce por una desconexión entre el órgano del olfato o del gusto y el receptor de este sentido en el cerebro y puede afectar de forma permanente al paciente.

Mire también: