Los detalles del ataque sexual del que acusan a Weinstein

Mientras forcejeaba con Harvey Weinstein, Mimi Haleyi le dijo ā€œno, no, noā€ antes de que Ć©ste la sujetara contra una cama y le realizara sexo oral por la fuerza, declarĆ³ la acusadora en un emotivo testimonio en el juicio de Weinstein por violaciĆ³n.

Haleyi, una de dos mujeres cuyas acusaciones de abuso llevaron al juicio del exmagnate de Hollywood, subiĆ³ al estrado el lunes y detallĆ³ su versiĆ³n de cĆ³mo Weinstein la atacĆ³ en el apartamento de Ć©l en Nueva York en 2006.

ā€œLo rechacĆ©, pero Ć©l insistiĆ³. Cada vez que tratĆ© de salirme de la cama, el me volvĆ­a a empujar y a retenermeā€, declarĆ³ la ex asistente de producciĆ³n de ā€œProject Runwayā€, agregando que le dijo a Weinstein que tenĆ­a la menstruaciĆ³n en un intento por disuadirlo.

Haleyi, de ahora 42 aƱos, le dijo a los jurados que pensĆ³ ā€œme estĆ”n violandoā€, y considerĆ³ diferentes opciones. ā€œSi grito violaciĆ³n, Āæme escucharĆ” alguien?ā€.

ā€œMe di por vencida y decidĆ­ soportarloā€, dijo. ā€œEra lo mĆ”s seguro que podĆ­a hacerā€.

Haleyi es la primera de las dos mujeres en el centro del caso que sube al estrado. Un total de seis acusadoras, incluyendo la aspirante a actriz que estĆ” acusado de violar en un cuarto de hotel en Manhattan en 2013, rendirĆ”n declaraciĆ³n en el muy seguido juicio de la era de #MeToo.

Weinstein, de 67 aƱos, ha insistido en que todas sus relaciones sexuales fueron consensuadas.

La semana pasada, la actriz de ā€œThe Sopranosā€ (ā€œLos Sopranoā€) Annabella Sciorra testificĆ³ que Weinstein la sometiĆ³ y violĆ³ despuĆ©s de entrar por la fuerza a su apartamento a mediados de la dĆ©cada de 1990. Aunque el caso ha prescrito, los fiscales podrĆ­an usar las acusaciones de Sciorra para demostrar que Weinstein tenĆ­a un patrĆ³n de comportamiento predatorio.

The Associated Press no suele identificar a personas que dicen que ha sido vĆ­ctimas de abuso sexual a menos de que Ć©stas lo autoricen, como lo han hecho Haleyi y Sciorra.

Haleyi denunciĆ³ pĆŗblicamente a Weinstein en octubre de 2017 en una conferencia de prensa acompaƱada por la abogada Gloria Allred, quien tambiĆ©n representa a Sciorra y a otras acusadoras del productor de cine.

Haleyi, quien naciĆ³ en Helsinki, Finlandia y creciĆ³ en Suecia, dijo que conociĆ³ a Weinstein cuando era una veinteaƱera en el estreno de la pelĆ­cula ā€œThe Aviatorā€ (ā€œEl aviadorā€) con Leonardo DiCaprio en 2004 en Londres.

Volvieron a cruzarse en el Festival de Cine de Cannes en 2006 y, cuando ella expresĆ³ interĆ©s en trabajar en una de sus producciones, Ć©l la invitĆ³ a su habitaciĆ³n de hotel y le pidiĆ³ un masaje. Ella lo rechazĆ³, diciendo que se sentĆ­a ā€œextremadamente humilladaā€.

Tuvieron mĆ”s encuentros y Weinstein le consiguiĆ³ a Haleyi un trabajo en el set de ā€œProject Runwayā€, un reality que Ć©l producĆ­a. Haleyi testificĆ³ que antes de la supuesta violaciĆ³n, Weinstein se presentĆ³ en su apartamento y le rogĆ³ que lo acompaƱara en un viaje a ParĆ­s para un desfile de modas.

ā€œEn un momento, porque no sabĆ­a cĆ³mo disuadirlo… le dije: ā€˜Tienes una reputaciĆ³n terrible con las mujeres, segĆŗn he escuchadoā€™ā€, declarĆ³ Haleyi.

Cuando la fiscal Meghan Hast le preguntĆ³ si tenĆ­a interĆ©s alguno en una relaciĆ³n romĆ”ntica o sexual con Weinstein, Haleyi respondiĆ³ con firmeza: ā€œPara nada, noā€.

Haleyi tambiĆ©n describiĆ³ un secundo encuentro unas semanas despuĆ©s de la supuesta violaciĆ³n en una habitaciĆ³n de un hotel de Tribeca donde dijo que se sintiĆ³ ā€œaturdidaā€ mientras Ć©l la tomaba de la mano, la jalaba hacia la cama y tenĆ­a sexo con ella.

DeclarĆ³ que no llamĆ³ a la policĆ­a porque estaba trabajando en Estados Unidos con una visa de turista y le temĆ­a a Weinstein: ā€œObviamente el seƱor Weinstein tiene mucho mĆ”s poder, recursos y conexiones. No pensĆ© que tendrĆ­a chanceā€, le dijo a los jurados.

Haleyi dijo que se sintiĆ³ ā€œcomo una idiotaā€ por permitir que Weinstein la convenciera de que volvieran a reunirse, pero que pensĆ³ que verlo podrĆ­a ayudarla a retomar el poder al tratar de encontrarle sentido al supuesto abuso.

Cuando le volvieron a preguntar si querĆ­a tener relaciones con Weinstein esa noche, dijo: ā€œNoā€.

Weinstein estuvo tomando notas en una libreta amarilla durante la mayor parte del testimonio de Haleyi, pero la mirĆ³ y negĆ³ con la cabeza cuando ella describiĆ³ el segundo supuesto ataque.

Haleyi fue cuestionada por el abogado defensor Damon Cheronis, quien le preguntĆ³ por quĆ© siguiĆ³ teniendo interacciĆ³n con Weinstein, mientras mostraba en una gran pantalla un correo electrĆ³nico amigable que le enviĆ³ despuĆ©s de que se reunieron en Cannes en 2008.

Haleyi admitiĆ³ que estuvo en contacto con Weinstein, ā€œno seguido, pero sĆ­ ocasionalmenteā€, y que enviĆ³ el correo de 2008 luego que un artĆ­culo le recordara una conversaciĆ³n que tuvieron semanas antes del supuesto abuso.

El jurado de siete hombres y cinco mujeres escuchĆ³ la semana pasada el testimonio de la doctora Barbara Ziv, psiquiatra forense, quien dijo que la mayorĆ­a de las vĆ­ctimas de abuso sexual siguen estando en contacto con sus atacantes, generalmente bajo amenaza de represalias si cuentan lo acontecido.

En el estrado el lunes, Haleyi dijo que lidiĆ³ con los presuntos ataques compartimentando, interactuando ocasionalmente con Weinstein a un nivel profesional para hacerle llegar guiones de amigos o discutir oportunidades de trabajo.

ā€œHonestamente, no sabĆ­a cĆ³mo lidiar con esto asĆ­ que es como si lo hubiera metido en una caja, como si no hubiera ocurrido, y seguĆ­ actuando como de costumbreā€, dijo Haleyi.