Portugal despenaliza la eutanasia

Portugal se convirtiĆ³ este viernes en el sĆ©ptimo paĆ­s del mundo en aprobar la despenalizaciĆ³n de la eutanasia despuĆ©s de que el Parlamento diera luz verde a un proyecto de ley que debe ser sancionado ahora por el presidente, Marcelo Rebelo de Sousa.

Aprobada por 136 votos a favor, 78 en contra y 4 abstenciones, es una ley Ā«totalmente plural, que respeta a quien escoge el dĆ­a de su muerte con la ayuda de terceras personasĀ», segĆŗn Isabel Moreira, diputada de gobernante Partido Socialista (PS).

Portugal se suma asƭ a una lista en la que se encuentran ya EspaƱa, BƩlgica, Holanda, Luxemburgo, CanadƔ y Colombia.

La propuesta saliĆ³ adelante, tras un aƱo de tramite parlamentario, con el apoyo de los grupos de izquierda, con el rechazo de la derecha;Ā y en medio de un tenso debate sobre la idoneidad del momento, cuando el paĆ­s estĆ” azotado por una ola descontrolada de covid que hoy dejĆ³ 278 muertos.

Tanto socialistas como el Partido Social DemĆ³crata (PSD), de centroderecha y principal fuerza de la oposiciĆ³n, dieron libertad de voto a sus diputados.

En el caso del PS, todos votaron a favor salvo 11 (9 en contra y dos abstenciones); mientras que en las filas del PSD, 56 rechazaron la medida, 2 se abstuvieron y 14 la apoyaron.

La norma establece que el solicitante de muerte asistida debe ser mayor de edad, sin problemas mentales y en situaciĆ³n de sufrimiento Ā«duradero e insoportableĀ».

AdemĆ”s de tener una enfermedad o lesiĆ³n incurable, la decisiĆ³n final serĆ” evaluada por un comitĆ© de expertos y solo podrĆ” practicarse en el Sistema Nacional de Salud (SNS).

POLƉMICA POR LA DESPENALIZACIƓN DE EUTANASIA

La iniciativa provocĆ³ una gran polĆ©mica en la sociedad portuguesa, que se vio reflejada este viernes en la sesiĆ³n parlamentaria.

El Partido Comunista (PCP) apoyĆ³ la propuesta porque supone la comprensiĆ³n de una situaciĆ³n lĆ­mite en la que una persona se puede encontrar.

Para el portavoz de los Verdes, LuĆ­s Pereira, es Ā«una buena leyĀ», porque al fin Ā«la muerte mĆ©dicamente asistida no es punibleĀ»; aunque lamentĆ³ que sĆ³lo sea posible en el sistema pĆŗblico de salud.

SegĆŗn el lĆ­der de Partido Animalista, AndrĆ© Silva, esta ley recoge el Ā«sentimiento general de los portugueses de dar libertad a quienes pueden elegir lĆŗcidamente en el final de su vidaĀ».

Ā«Es una ley justa, rigurosa y confiable; en la que un acto de bondad deja de ser un acto punible que condena a prisiĆ³nĀ», argumentĆ³ Silva.

Desde la derecha, por el contrario, Telmo Correia, diputado de CDS-PP, asegurĆ³, parafraseando al papa Francisco, que supone Ā«una derrota para todosĀ», ya que Ā«la respuesta no es abandonar a los que sufrenĀ».

Esta ley Ā«es un error porque permite matar vidas que podĆ­an ser salvadas. Es una indignidad y va en contra de la ConstituciĆ³n de la RepĆŗblica PortuguesaĀ», concluyĆ³ Correia.

REACCIƓN DE LA IGLESIA CATƓLICA

La reacciĆ³n de la iglesia catĆ³lica no se ha hecho esperar. Los obispos de Portugal expresaron su Ā«tristeza e indignaciĆ³nĀ» ante la despenalizaciĆ³n de la eutanasia Ā«en el momento de mayor gravedad de una pandemia mortĆ­fera, donde todos nos empeƱamos en salvar el mayor nĆŗmero de vidasĀ».

Ā«No podemos aceptar que la muerte provocada sea la respuesta a la enfermedad y al sufrimientoĀ», recoge un comunicado.

La iniciativa se ha debatido en diferentes Comisiones del Parlamento de Portugal desde hace un aƱo tras las cinco propuestas sobre eutanasia. Todas las prouestas discutidas muy similares y presentadas por el PS, el Bloque de Izquierda, el partido animalista PAN, el grupo ecologista PEV, e Iniciativa Liberal.

Durante este largo proceso se han sucedido movilizaciones de partidarios y detractores de la despenalizaciĆ³n de la muerte asistida. Hoy, con el paĆ­s confinado, no ha habido manifestaciones.

Ahora, la Ćŗltima palabra la tendrĆ” el presidente Marcelo Rebelo de Sousa, que debe ratificarla para su entrada en vigor.