La nueva tarifa es uno de los puntos clave que se trata en la ordenanza que regula el Sistema Integrado de Transporte Público.
De no aprobarse esta ordenanza, se podría retrasar la operación del Metro de Quito. Además, la Empresa Pública de Transporte de Pasajeros tendría una afectación aún más grave.
La Secretaría de Movilidad recomendó, por ejemplo, que la nueva tarifa para el transporte convencional sea de 0,35 centavos, para el Metro de Quito de 0,45 centavos y para el sistema integrado de 0.60 centavos
Con esta tarifa integrada del Metro y el Metrobus-Q el Municipio de Quito tendría que pagar una compensación.
Según el presidente del Observatorio de Movilidad. Cristóbal Buendía, el Municipio si podría pagar este subsidio reuniendo fondos con la recaudación que está relacionada con la movilidad. Es decir multas de tránsito, recaudo por concepto de matriculación, por concepto de parqueo, por concepto de publicidad y por concepto de explotación de los espacios comerciales de las terminales y paradas.
La normativa vigente establece que es el Concejo Metropolitano el que debe fijar la nueva tarifa de transporte. Sin embargo, la Comisión de Movilidad, recomendó, tras los diálogos con los trasportistas, delegar esta decisión al Alcalde de Quito.
Lo cierto es que esta ordenanza que regula el Sistema del Transporte Público y que establece la fórmula para el cálculo de la nueva tarifa está ahora en manos del Concejo Metropolitano. Este deberá decir el futuro del proyecto y con el del 70% de quiteños que usan transporte público
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