El gobernador de Florida (EE.UU.), Rick Scott, dijo este jueves que la destrucción causada por el huracán Michael en el noroeste del estado es “inimaginable” y ya está en marcha “un esfuerzo masivo” por tierra, mar y aire para ayudar a los damnificados.
Scott ofreció una rueda de prensa en el Centro de Operaciones de Emergencia en Tallahassee, la capital del estado, después de haber hablado con el presidente Donald Trump, quien, según dijo, está dispuesto a facilitar los recursos federales que se necesiten para afrontar la situación creada por Michael.
El huracán tocó tierra este miércoles en Mexico Beach con vientos de 155 millas por hora (250 km/h), acompañados de lluvias intensas y una marejada ciclónica que elevó el nivel del mar en hasta 14 pies (4,2 metros) en algunas zonas.
Hasta ahora se han confirmado dos muertes, una en Florida y otra en la vecina Georgia, y los daños que muestran las fotografías e imágenes de televisión parecen cuantiosos, pero aún no se ha hecho siquiera una evaluación preliminar, pues el foco, según dijo Scott, está puesto en las “personas”.
En ese sentido, exhortó a los residentes en la zona afectada que la abandonaron antes de la llegada del huracán a no apresurarse a regresar a sus casas y a los que no dejaron sus hogares a no salir al exterior, pues la situación sigue siendo “peligrosa”.
El gobernador dijo que durante la noche del miércoles los equipos de emergencia realizaron diez misiones y este jueves continúan volcados en la búsqueda y rescate de personas que pueden estar atrapadas, en la retirada de escombros de las carreteras y calles y en llevar alimentos y agua a los damnificados.
En el “esfuerzo masivo” de respuesta, como lo llamó, participan miles de agentes de la Guardia Nacional y de fuerzas policiales, la Policía de carreteras, los alguaciles, agencias federales y estatales y organizaciones humanitarias como la Cruz Roja, entre otros.
Los equipos de rescate cuentan con helicópteros, vehículos especiales y embarcaciones, señaló al hacer un pormenorizado recuento y agradecer la contribución en personal y recursos hecha por otros estados del país.
Es una operación por “tierra, mar y aire”, dijo Scott en una rueda de prensa en la que habló predominantemente en inglés, pero también en español, y en la que destacó también el esfuerzo de las compañías de electricidad y de telecomunicaciones por restablecer sus servicios.
Más de 358.000 familias y negocios están sin servicio eléctrico en todo Florida, debido al paso de Michael, según el Equipo de Respuesta de Emergencia del Estado (SERT, en inglés), que indica que en condados como el de Bay, en donde el ciclón tocó tierra este miércoles, el 98 % está a oscuras.
El gobernador anunció que se disponía a hacer un recorrido por Mexico Beach y Panama City para conocer de primera mano lo ocurrido en esas dos localidades por donde el centro del huracán entró a tierra.
Según dijo, la Guardia Nacional de Florida contactó el miércoles mismo a una veintena de personas que estaban en Mexico Beach cuando pasó el huracán, las cuales “afortunadamente” no habían sufrido daños.
En Panama City, donde hay dos hospitales, se logró evacuar a todos los pacientes en estado crítico, dijo Scott.
Pese a recalcar la tarea ingente que tienen por delante los “héroes”, como llamó a los que participan en las operaciones de respuesta a la situación, se mostró confiado.
“Nos recuperaremos y lo haremos juntos”, indicó.
Fuente: EFE
El potente huracán Michael avanza a 13 millas por hora (20 km/h) y con vientos reforzados de hasta 145 millas por hora (230 km/h) en dirección a la costa noroccidental de Florida, donde se espera que toque tierra en unas horas.
Desde 2005 no ha llegado a la zona del “Panhandle” un huracán como Michael, que ha ido fortaleciéndose desde que este martes se adentró en el Golfo de México y hoy de madrugada llegó a la categoría 4 de una escala de 5.
El Centro Nacional de Huracanes (NHC), con sede en Miami, advirtió en su más reciente boletín que es posible todavía un fortalecimiento de Michael, un huracán “potencialmente catastrófico”, antes de que toque tierra en algún punto del “Panhandle” (el mango de la sartén), como se conoce esa zona de Florida, pasado el mediodía.
Según el más reciente boletín del NHC, Michael se estaba moviendo hacia el norte y se encontraba a alrededor de 90 millas (145 km) al suroeste de Panama City (Florida) y a alrededor de 90 millas (145 km) al oeste-suroeste de Apalachicola (Florida).
Las autoridades han dado órdenes de evacuar sus hogares o pedido que lo hagan voluntariamente a unas 375.000 personas de la zona costera, según recogen diversos medios locales.
Los vientos de intensidad de huracán se extienden hasta 45 millas (75 km) del centro de Michael y los vientos de intensidad de tormenta tropical se extienden hasta 185 millas (295 km).
Sin embargo, el gran temor son las inundaciones que pueden provocar las lluvias que pueden llegar hasta 12 pulgadas (30,4 cm) en algunas zonas combinadas con una crecida del mar de hasta 13 pies (3,9 metros) en determinados sitios.
Treinta y cinco condados de los 67 que tiene Florida están en estado de emergencia, al igual que otros en Alabama, Georgia y Carolina del Sur.
Los avisos y recomendaciones de vigilancia del NHC por Michael abarcan a Florida, Alabama, Misisipi y las dos Carolinas.
Según el NHC, se espera que Michael gire hacia el nornoreste antes de tocar tierra y luego hacia el noreste esta tarde o esta noche.
Con una velocidad de traslación menor pero debilitado, Michael se dirigirá hacia el noreste a través del sureste de Estados Unidos a partir de esta noche o el jueves y luego se alejará de la parte media de la costa atlántica de Estados Unidos el viernes. EFE
La tormenta tropical Michael se convirtió hoy en huracán provocando fuertes vientos y lluvias en el oeste de Cuba rumbo a la costa noroeste de Florida (EE.UU.), región donde el gobernador Rick Scott ya decretó el estado de emergencia.
El sistema presentaba vientos máximos sostenido de 75 millas por hora (120 km/h) con ráfagas más altas, según el más reciente boletín del Centro Nacional de Huracanes (NHC, en inglés).
El centro precisó que el huracán está 50 millas (80 km) del suroeste de la punta occidental de Cuba y 140 millas (220 km) del este noreste del Cozumel (México) con un desplazamiento hacia el norte a una velocidad de 7 millas por hora (11 km/h).
Esta tarde, el NHC prevé que Michael se moverá hacia el norte cerca de la punta occidental de Cuba y esta noche sobre el sureste del Golfo de México.
El martes el NHC, con sede en Miami, pronostica un desplazamiento hacia el este del Golfo de México, y se espera que el miércoles toque tierra sobre el área del Panhandle de Florida o sobre Big Bend para luego moverse hacia el noreste a través del sureste de Estados Unidos.
El NHC mantiene el aviso de huracán para la provincia cubana de Pinar del Río, lo mismo que los avisos de tormenta tropical para la Isla de la Juventud y la costa mexicana desde Tulum hasta Cabo Catoche.
El centro emitió también una vigilancia de marejada ciclónica para la costa oeste de Florida, desde Navarre hasta la Isla de Ana María, incluyendo la Bahía de Tampa, en la costa oeste de Florida.
El gobernador Scott emitió por su parte una orden ejecutiva que declara en estado de emergencia una gran porción de los condados del Panhandle, en la costa noroeste de Florida.
El NHC advirtió que la combinación de una marejada ciclónica peligrosa y la marea causarán que áreas normalmente secas cerca de la costa de Florida se inunden.
Precisó que el agua podría llegar de 7 a 11 pies (2 a 3 metros) entre los ríos Indian Pass y Crystal, y hasta 4 pies (1 metro) entre los ríos Crystal y Anclote.
El área de la Bahía de Tampa enfrenta también peligro de inundación de hasta 4 pies (1 metro) entre el río Anclote hasta la Isla de Ana María.
Hay también vigilancia de huracán en efecto para la costa estadounidense desde el río Suwannee hasta los límites de Florida y Alabama. EFE