Los comerciantes de varios locales en la Bahía de Guayaquil afirman que son víctimas de extorsionadores que piden dinero a cambio de seguridad. Aquellos grupos delictivos aseguran a las víctimas que conocen a sus familiares y sus movimientos. También dicen que conocen dónde viven y otros detalles para generar temor y presión. Es ahí cuando piden que, a cambio de no atentar contra los suyos, les entreguen dinero. Desde el lugar de los hechos tenemos los testimonios de algunos comerciantes.