Desde vapeadores hasta fumar en su principal plaza, México endurece normas antitabaco

México lanzó nuevas restricciones al consumo de tabaco, como prohibir la venta de vapeadores y cigarros electrónicos.

Así como fumar en cualquiera de sus modalidades en el emblemático Zócalo capitalino (plaza central).

El presidente Andrés Manuel López Obrador firmó un decreto que prohíbe la comercialización y circulación de estos nuevos artefactos para fumar con el argumento de que son dañinos para la salud.

«Es mentira que los nuevos productos, los vapeadores, son una alternativa al cigarro. (…) Hay una propaganda que indica que lo que hace daño es quemar el tabaco, el humo, pero eso es falso. También los vapores son dañinos para la salud», dijo el mandatario izquierdista.

Los vapeadores actúan calentando un cartucho de líquido que contiene nicotina y otras toxinas en aerosol.

Los usuarios inhalan el vapor resultante imitando el consumo de cigarros convencionales.

México ya había prohibido en octubre pasado la importación y exportación de los vapeadores, cigarros electrónicos y sus cartuchos, pero las empresas siguieron vendiendo productos que tenían en reserva, dijo durante la presentación del decreto el subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell.

Este nueva medida, presentada este martes cuando se conmemora el Día Mundial Sin Tabaco, prohíbe «también la circulación y comercialización de estos nuevos productos», detalló el funcionario.

López Obrador mostró un vapeador de color rosa para ilustrar cómo se presentan estos productos para atraer a los jóvenes.

«Fíjense el color, el diseño», dijo al explicar que cuesta unos 15 dólares en México.

Economía

El comercio se ha mantenido principalmente por vía electrónica, además de que en las calles abundan vendedores de estos artefactos y de cigarros de contrabando, la mayoría de China, que cuestan una cuarta parte de un paquete del mercado legal.

La alcaldía de la capital se sumó a las nuevas restricciones al anunciar que desde este martes está prohibido fumar en el Zócalo y zonas aledañas, uno de los puntos más transitados de la ciudad, con numerosos establecimientos comerciales, museos y atractivos turísticos.

«Todo lo que es el Zócalo de la Ciudad de México y sus calles alrededor está prohibido fumar, el uso de cualquier cigarro, vapeador, etcétera, que emita humo», dijo en rueda de prensa la alcaldesa Claudia Sheinbaum.

Y aunque leyes locales sancionan desde hace más de una década fumar en sitios públicos, con multas de 45 a 85 dólares, la alcaldía asegura que el objetivo es que la gente cobre conciencia de los daños a la salud.

«Estamos confiados en que la gente va a cooperar en el momento que se les informe», añadió Sheinbaum.

Reconocimiento a México

La firma del decreto presidencial se realizó en presencia de Miguel Malo Serrano, representante de la OMS/OPS en México, quien entregó un reconocimiento al mandatario por las acciones de su gobierno contra el consumo de tabaco.

En el Congreso se anticipa además la discusión de una iniciativa para ampliar los sitios donde está prohibido fumar, para incluir playas, estadios y centros de espectáculos al aire libre.

Las prohibiciones vigentes incluyen fumar en espacios cerrados, oficinas gubernamentales, comercios, bares y restaurantes, aunque hay algunas excepciones en centros de diversión.

Según un reporte de la OMS del año pasado, 32 países habían prohibido productos relacionados con el tabaco y en 79 hay restricciones; entre ellos figuran una decena de países americanos.

En abril pasado, en Estados Unidos, la firma de vapeadores Juul acordó pagar 22,5 millones de dólares por una demanda que le acusaba de enfocar su publicidad en adolescentes y mentir sobre qué tan adictivos son sus productos.

La OMS advirtió en un informe divulgado el lunes que la industria del tabaco es uno de los mayores contaminantes del mundo y responsable de la pérdida de unos 600 millones de árboles cada año, pues utiliza 200.000 hectáreas de tierra y 22.000 millones de toneladas de agua anualmente.