¿Por qué es importante el estrecho de Ormuz para la economía mundial?
El estrecho de Ormuz es una de las rutas marítimas más estratégicas del planeta. Por sus aguas transita gran parte del petróleo mundial.

Barcos petroleros cruzan el estrecho de Ormuz, en el lado del Golfo de Omán.
EFE
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Actualizada:
23 jun 2025 - 13:07
Situado entre Irán y Omán, el estrecho de Ormuz es una de las rutas marítimas más estratégicas del planeta. Este lunes 23 de junio del 2025 el Parlamento iraní pidió cerrar este paso marítimo tras los ataques de Estados Unidos a la centrales nucleares en territorio iraní.
La vía fluvial, ubicada entre el golfo Pérsico y el golfo de Omán, tiene tan solo 34 kilómetros de ancho en su punto más estrecho. Es la única vía para transportar crudo desde el golfo Pérsico, rico en petróleo, al resto del mundo. Irán controla su lado norte.
Por sus aguas transita casi una quinta parte del petróleo mundial, lo que convierte a esta vía en un punto clave para la estabilidad económica y energética global. Según analistas internacionales citados por la BBC, en caso de que se concrete el cierre, el precio del petróleo podría elevarse hasta los 100 dólares por galón.
Cada día, por el estrecho de Ormuz pasan más de 20 millones de barriles de petróleo, lo que representa alrededor del 20% del suministro global, según la Administración de Información Energética de Estados Unidos (EIA, por sus siglas en inglés), que calificó el canal como un “cuello de botella petrolero crítico”.
Países como Arabia Saudita, Irak, Emiratos Árabes Unidos, Kuwait, Qatar e Irán dependen de esta vía para exportar su crudo y gas natural licuado (GNL) a los mercados de Asia, Europa y América.
Aunque es considerado un paso marítimo internacional, el control efectivo del estrecho está dividido entre Irán y Omán, de acuerdo a las delimitaciones establecidas en 1975. Sin embargo, la capacidad real de influencia la ejerce Irán, que no ha dudado en mostrar músculo militar cuando se siente amenazado.
Su flota naval, sus baterías de misiles en tierra, sus drones de vigilancia y ataque, e incluso sus capacidades cibernéticas le otorgan un control potencial casi absoluto sobre el paso. Esto convierte al estrecho en una arteria energética esencial.
Un bloqueo, una crisis militar o un ataque en esta zona no solo afectarían a las economías productoras, sino que provocaría un alza inmediata en los precios del petróleo y el gas, impactando desde el transporte y la producción industrial hasta los costos de vida en países importadores.
Riesgos geopolíticos y económicos
La ubicación del estrecho entre Irán y el sultanato de Omán lo convierte en un punto de fricción constante. En los últimos años, ha sido escenario de amenazas de cierre, sabotajes a buques petroleros y presencia militar de potencias como Estados Unidos y el Reino Unido.
Según la National Geographic, el estrecho de Ormuz es, posiblemente, uno de los puntos más militarizados del planeta. “La presencia de flotas estadounidenses, británicas y francesas no es casualidad: el mundo sabe que el control de este paso equivale al control de un buen porcentaje de su pulso económico”, detalla la revista en una publicación.
Irán ha utilizado repetidamente la amenaza de bloqueo como herramienta de presión geopolítica, pero nunca se ha dado el cierre. De concretarse, el hecho provocaría inestabilidad en los mercados bursátiles y energéticos.
Por esta razón, los precios del petróleo suelen reaccionar con gran sensibilidad ante cualquier noticia relacionada con la región. De acuerdo con el Washington Post, se estima que, si esta ruta llegase a bloquear por completo su tráfico, el suministro mundial de petróleo caería un 20%, en el menor de los casos.
Alternativas limitadas
Aunque algunos países del Golfo han invertido en oleoductos alternativos para evitar el paso por el estrecho, no existen rutas viables que puedan reemplazar completamente su capacidad de transporte.
Además, la construcción de nuevas infraestructuras de este tipo implica altos costos y largos plazos, lo que hace que, al menos por ahora, el estrecho de Ormuz siga siendo irremplazable.
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