Estudios realizados en el primer grupo de contagiados con el coronavirus en Alemania, han permitido establecer el momento en el que ya no supone un riesgo para la población dar de alta a pacientes hospitalizados por COVID-19, lo que permitirÃa liberar espacio en una situación de escasez de camas.
En un comunicado conjunto, la clÃnicas Charité de BerlÃn y Schwabing de Múnich, asà como el Instituto de MicrobiologÃa del ejército alemán revelan que el paciente deja de ser contagioso cuando las pruebas que se le extraen del área nasofarÃngea y de los fluidos expulsados al toser presentan menos de 100 000 copias del genoma del virus.
Los resultados del estudio, realizado en el grupo de infectados por el foco en la empresa de componentes para automóviles alemana Webasto, indican en la mayorÃa de los casos que la carga vÃrica en la faringe se habÃa reducido notablemente pasada la primera semana de enfermedad, en el pulmón, algo más tarde.
Ocho dÃas después de presentar los primeros sÃntomas, los expertos ya no fueron capaces de aislar partÃculas infecciosas del virus en los pacientes a pesar de detectar todavÃa copias del genoma del virus en faringe y pulmón.
Este descubrimiento permite, según Roman Wölfel, director del Instituto de MicrobiologÃa del ejército alemán y uno de los autores principales del estudio, sacar dos conclusiones.
En primer lugar, «la elevada carga vÃrica en la faringe inmediatamente con los primeros sÃntomas apunta a que los pacientes con COVID-19 son ya muy pronto infecciosos, posiblemente incluso antes de darse cuenta de que están enfermos», señala.
«Al mismo tiempo, la capacidad infecciosa de pacientes con COVID-19 parece depender de la carga vÃrica en la faringe o el pulmón. Eso es un factor importante a la hora de decidir cuándo puede un paciente ser dado de alta como más pronto en caso de escasez de camas y la correspondiente presión de tiempo», subraya.
De acuerdo con estos datos, los autores del estudio, cuyos resultados se publican en la revista «Nature», estiman que los pacientes contagiados con COVID-19 pueden ser dados de alta y pasar a cuarentena domiciliaria si, diez dÃas después de enfermar, presentan en los fluidos expulsados al toser menos de 100 000 copias del genoma del virus.
Los cientÃficos determinaron también que el SARS-COV-2 probablemente se multiplica en el tracto gastrointestinal, aunque no se pudo detectar la presencia de virus infecciosos en las heces de los pacientes.
Además, en la sangre y la orina de los pacientes no se detectó el virus.
Por otra parte, se analizaron los sueros sanguÃneos de los pacientes en busca de anticuerpos contra el SARS-CoV-2.
La mitad del grupo, que fue analizado durante 28 dÃas desde la aparición de los primeros sÃntomas, habÃa desarrollado hasta el séptimo dÃa anticuerpos contra el virus; dos semanas después, todos los pacientes habÃan producido anticuerpos.
A su vez, con la producción de anticuerpos también se redujo lentamente la carga vÃrica.
Ya a principios de febrero, los cientÃficos habÃan revelado que algunos de los pacientes analizados presentaban incluso con una sintomatologÃa leve del virus infeccioso en el área nasofarÃngea.
«Eso quiere decir que el nuevo coronavirus se puede multiplicar en la faringe sin necesidad de llegar al pulmón y por lo tanto es muy fácilmente transmisible» explica Christian Drosten, director del Instituto de VirologÃa de la Charité y coautor principal del estudio.
El grupo de cientÃficos tiene previsto ahora, a partir de este primer grupo de pacientes pero también en otros contagiados, analizar el desarrollo a largo plazo de la inmunidad contra el SARS-CoV-2, datos que podrÃan contribuir al desarrollo de una vacuna. EFE