Una doctora fue sancionada en Chile con una anotaciĆ³n negativa en su hoja de vida por contagiarse con covid-19 .
La sanciĆ³n fue por supuestamente no utilizar adecuadamente los implementos de seguridad dispuestos para quienes atienden a pacientes sospechosos o infectados.
Doctora sancionada
La doctora Heidie Darwit, mĆ©dico cirujana, trabaja en el servicio de urgencia del Hospital Claudio VicuƱa, en el vecino puerto de San Antonio, al noroeste de Santiago, y fue recibida por aplausos de sus colegas cuando retornĆ³ a trabajar tras una ausencia de un mes. Se infectĆ³ a fines de marzo.
SanciĆ³n por contagiarse
Sin embargo, la alegrĆa y emociĆ³n que sintiĆ³ al volver a trabajar terminĆ³ cuatro dĆas despuĆ©s, cuando se le notificĆ³ que recibirĆa āuna anotaciĆ³n de demĆ©rito, por el hecho de haber enfermado, aduciendo que habĆa sido su culpaā, se denunciĆ³ el jueves en una declaraciĆ³n del grupo que reĆŗne al personal mĆ©dico de San Antonio.
Contagiados en Chile
En Chile confirma mƔs de 700 funcionarios de la salud estƔn contagiados y centenares fueron puestos en cuarentena preventiva.
A fines de abril falleciĆ³ una empleada de un centro mĆ©dico popular en el sur. AdemĆ”s, se sabe que un matrimonio de paramĆ©dicos fue hospitalizado, con tres dĆas de diferencia, tras contagiarse con el virus. Los contagiados superan los 24.000 y 285 fallecieron.
ĀæCĆ³mo se contagiĆ³ la doctora?
La profesional asegura que se contagiĆ³ con una colega infectada asintomĆ”tica.
El hospital de San Antonio y la ciudad, con alrededor de un centenar de contagios, presenta el mayor brote de coronavirus de la regiĆ³n de ValparaĆso, al que pertenece.
Darwit declarĆ³ al canal estatal de televisiĆ³n que fue sancionada, segĆŗn la notificaciĆ³n:
āpor no utilizar elemento de protecciĆ³n personal durante turno, en la atenciĆ³n de pacientes, resultando contagiadaā.
āLo anecdĆ³tico (de) culpar a un funcionario con una anotaciĆ³n en su hoja de vida, que puede afectar su carrera funcionaria, por haberse contagiado, es absurdoā, aƱadiĆ³.
La agrupaciĆ³n de especialistas de San Antonio calificĆ³ de āinjusta e inaudita disposiciĆ³nā, y solicitĆ³ reunirse con la directora del hospital, Liliana EcheverrĆa para analizar la sanciĆ³n.
āLamentablemente la respuesta fue que la anotaciĆ³n estaba cursada y seguirĆa su curso legal habitualā.
EcheverrĆa leyĆ³ una declaraciĆ³n que seƱala que la situaciĆ³n que afecta a la doctora estĆ” contemplada en un Estatuto Administrativo, y que puede apelar. āActualmente la anotaciĆ³n de demĆ©rito sigue su cursoā, aƱadiĆ³.
Luis Ignacio de la Torre, presidente de la agrupaciĆ³n de mĆ©dicos de ValparaĆso, criticĆ³ la sanciĆ³n, que genera incertidumbre entre los funcionarios, declarĆ³ que _
āSi llegan a padecer la enfermedad, ademĆ”s tendrĆ”n que preocuparse de defenderse… de una autoridad que no estĆ” siendo empĆ”tica, que no estĆ” comprendiendo el temor y la vulnerabilidad de los trabajadoresā.
La presidenta de los mĆ©dicos chilenos, Izkia Sichel, exhortĆ³ al Ministerio de Salud a anular la sanciĆ³n.