Un hombre en China, identificado como Tang Lu, mató a su exesposa tras prenderle fuego durante una transmisión en vivo. A causa del delito, un tribunal del país lo condenó a morir, por lo que fue ejecutado el pasado sábado 23 de julio de 2022 en la mañana.
Medios locales e internacionales confirmaron fin de un caso que provocó horror e indignación en todo el país. Según información de CNN, el criminal tenía un historial de abuso físico hacia su expareja, identificada como Lhamo, por lo que se divorciaron en junio de 2020.
Tras innumerables intentos fallidos de Tang Lu para volver con Lhamo, en septiembre de 2020 la buscó. Lhamo estaba transmitiendo en vivo para Douyin, la plataforma similar a TikTok, cuando Tang apareció detrás de ella, le echó gasolina y le prendió fuego. Murió dos semanas después debido a las graves herdias.
Tang fue arrestado poco después del ataque y sentenciado a muerte en octubre de 2021. La decisión fue apelada por la defensa del criminal, pero perdió el recurso en enero de este año.
En redes sociales, con hashtags incluyendo #LhamoAct, usuarios pidieron leyes que permitan a las víctimas un divorcio automático, pero fueron cerradas rápidamente por los censores. El caso reavivó el debate sobre la violencia contra las mujeres y la desigualdad de género en China. Un tema controversial que continúa desde la muerte de Lhamo.
Con información de | CNN en español/