Bolsonaro, sin curarse de COVID-19, recibe a seguidores

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, quien todavía no se ha curado de COVID-19, recibió este domingo a centenares de seguidores en los jardines del Palacio da Alvorada, la residencia presidencial.

Antes del rito diario de la arriada de la bandera al final de la tarde por parte de la Guardia Presidencial, Bolsonaro salió de la residencia y se dirigió hasta sus seguidores. Los asistentes estuvieron varias horas en las afueras del palacio en una vigilia convocada por líderes evangélicos para pedir por la salud del mandatario.

CONCENTRACIÓN MASIVA

Separado por un espejo de agua de poco más de dos metros, el gobernante recorrió el extenso césped en donde estaban aglomerados sus seguidores. Muchos de ellos sin mascarilla de protección y sin respetar el distanciamiento determinado por las autoridades. Y a los gritos de «mito» levantó varias veces los brazos para saludar.

«Vamos a caminar con la pandemia, vamos a salir de ésta. Tenemos un excelente equipo de ministros, principalmente el de Salud. Y está todo dándose para que, rápidamente, vamos construyendo el futuro de Brasil», manifestó Bolsonaro en una breve declaración y con la mascarilla abajo para hablar.

El jefe de Estado comentó que no cree que el Congreso apruebe la ley contra las noticias falsas, que establece penas más severas y amplía el poder en las investigaciones. Esto porque «no vamos a perder nuestra libertad de expresión» y manifestó que las relaciones con el Legislativo, que recientemente pasó por fricciones, «son buenas».

«La renovación (en el Congreso) es natural, hasta para el cargo de presidente si es el caso. Pero ustedes están aquí y hacen movimientos democráticos para demostrar que su voto en 2018 va a valer hasta 2022. Y si es para cambiarlo entonces cambiarlo en las urnas», apuntó.

Para el líder de ultraderecha: «Siempre hay una alternativa en caso de que salga mal, pero será muy diferente a la de 2018. Puede estar seguro de que cambiaremos el país con las armas de la democracia».

MANIFESTACIÓN A FAVOR

Este domingo, cerca de 2 000 seguidores de Bolsonaro convocados por movimientos evangélicos marcharon en Brasilia con 27 cruces, en representación de cada estado del país. La convocatoria se realizó para manifestar su solidaridad al mandatario y criticar la gestión por parte de los gobernadores.

Bolsonaro, uno de los líderes mundiales más escépticos frente a la gravedad de la pandemia, contrajo el COVID-19 y anunció el resultado positivo de la prueba clínica el pasado 7 de julio.

El líder de ultraderecha está acostumbraba a acompañar las manifestaciones a su favor que suelen presentarse cada domingo durante la pandemia. En la mayoría participó sin mascarilla, como es obligatorio en el Distrito Federal y en otras partes del país, y llegó a abrazar a varios de sus simpatizantes.

Acérrimo defensor de la apertura del comercio y de algunas actividades económicas. Contrariando las cuarentenas y medidas rígidas de aislamiento social recomendadas por las autoridades sanitarias a nivel mundial, Bolsonaro ha delegado la responsabilidad de la gestión a los gobernadores, facultados por la Corte Suprema.

Brasil, el segundo país más afectado por el nuevo coronavirus detrás de Estados Unidos. El gigante sudamericano contabilizaba oficialmente hasta este domingo casi 2,1 millones de casos confirmados y cerca de 79.000 muertos. EFE