Brote de coronavirus en campo de migrantes en Grecia

Las autoridades griegas informaron el martes que detectaron un brote de COVID-19, con 35 casos confirmados hasta ahora entre los 12.500 residentes del campamento de migrantes más grande del país, una instalación superpoblada en la isla oriental de Lesbos.

Los funcionarios del Ministerio de Salud y Migración dijeron que los equipos médicos aplican una importante operación de pruebas y rastreo de contactos en las instalaciones de Moria.

Intalaciones inicialmente diseñadas para albergar a 2.800 personas.

Dijeron que ya han realizado 1.900 pruebas de coronavirus en el lugar y que harán otras 400 en los próximos días.

Campamento puesto en cuarentena

El campamento fue puesto en cuarentena hasta el 15 de septiembre, con un cordón policial para hacer cumplir la prohibición de entrada y salida limitada.

El ministro de Migración, Notis Mitarachi, dijo el lunes por la noche que las infecciones estaban relacionadas con un hombre somalí que abandonó el campo después de recibir asilo en Grecia y fue a Atenas, pero que regresó a Moria porque no encontró trabajo ni vivienda en la capital griega.

Los funcionarios de salud no pudieron confirmar de inmediato el martes que el virus haya sido transmitido por un solo hombre.

Críticas al gobierno

Los grupos de derechos humanos y las organizaciones benéficas que trabajan con migrantes han criticado repetidamente al gobierno de Grecia.

Lo hacen por las condiciones de vida en Moria, que consiste en un campamento principal rodeado por una ciudad de tiendas de campaña en expansión.

Desde que estalló la pandemia, los funcionarios griegos se centraron en prevenir los brotes de COVID-19 en los campamentos abarrotados de las islas del este del mar Egeo.

Poniendo en cuarentena a las personas que llegaban en barcos de contrabandistas desde Turquía y realizando pruebas para detectar el virus antes de permitirles ingresar a los campamentos.

Mire también

La estrategia funcionó bien hasta la semana pasada, cuando el hombre somalí regresó a una tienda de campaña fuera del campamento principal.

Mitarachi dijo en la entrevista del lunes con la televisora privada Alpha TV que el incidente fortaleció la determinación del gobierno de construir en la isla centros cerrados para solicitantes de asilo, donde la entrada y salida estarían estrictamente controladas.

AP