Denuncian abusos sexuales a ancianos en una residencia

Más de 2.500 incidentes de «contacto sexual ilegal» a ancianos se registraron en las residencias australianas entre julio de 2018 y junio de 2019, denunció este jueves el abogado Peter Rozen ante una comisión oficial.

«Es una vergüenza nacional», remarcó Rozen durante la última audiencia pública de la Comisión gubernamental sobre el Cuidado a la Tercera Edad.

Él manifestó que existen 50 abusos a la semana contra ancianos internados en los centros.

«Es completamente inaceptable que las personas en las residencias de cuidados de ancianos afronten un mayor riesgo de ser atacados que la gente que vive en la comunidad», añadió

Gobierno de Australia

El Gobierno australiano ordenó en 2018 investigar al sector del cuidado de adultos mayores tras las denuncias de maltratos contra ancianos en la residencia Oakden, en Australia del Sur.

Allí se les ataba para restringir sus movimientos, se les suministraba un exceso de medicamentos e incluso se denunció un presunto homicidio de un residente.

La comisión gubernamental tiene como objetivo investigar a la industria que se encarga de cuidar a los ancianos.

Además, deberá entregar sus recomendaciones finales de 2021.

En noviembre del año pasado, la comisión resaltó en su informe interino, titulado:

«Una historia estremecedora de negligencia», que se han presentado vídeos de ancianos que tenían gusanos en sus heridas abiertas.

Así como otros materiales que evidencian los abusos y negligencias en el sector.

Entre las recomendaciones preliminares emitidas durante las audiencias destacan acometer reformas en las proporciones de número de cuidadores y ancianos, una autoridad para fijar las tarifas, la creación de un proceso independiente para fijar los estándares de atención, entre otros.

En Australia se atiende a más de 1,2 millones de ancianos por este sector, según datos oficiales.

Esto tiene un coste anual por persona de unos 19.934 dólares (16.834 euros), mientras que los cuidadores.

Generalmente son mujeres con contratos temporales, ganan 16 dólares (13,78 euros) a la hora.