Los gatos tienen fama de poco sociables. Su independencia es muchas veces vista como indiferencia. Sin embargo, el vínculo que tienen con sus tutores suele ser muy fuerte. Las claves para entender cómo comunican sus sentimientos están en ser muy observadores y mantener una conexión positiva con ellos. Un felino contento suele estar relajado, con el cuerpo estirado y la cola en posición vertical. Si está molesto o asustado, puede erizar el pelaje y esconderse. Estas son algunas pistas para identificar las emociones de los gatos, esto ayudará a atender sus necesidades físicas y emocionales.