Muere cazador furtivo pisoteado por elefantes en Sudáfrica

Un supuesto cazador furtivo murió el pasado sábado pisoteado por una manada de elefantes en el Parque Nacional Kruger en Sudáfrica, confirmó hoy a Efe el portavoz de esa conocida reserva natural, Isaac Phaahla.

El fallecido y sus cómplices huían de los guardabosques cuando se toparon con una manada de elefantes reproductores en el citado parque (noreste); una de las principales atracciones turísticas del país austral.

«Cuando se dieron cuenta de que habían sido vistos, los presuntos cazadores furtivos arrojaron un hacha y una bolsa con sus provisiones en un intento de escapar de los guardabosques», explicó Parques Nacionales Sudafricanos (SANParks), organismo que gestiona esos espacios, en un comunicado

Uno de los sospechosos está detenido e informó a los perseguidores del encuentro fortuito con los paquidermos, no sabía si su compañero había logrado escapar.

«Los guardabosques descubrieron a su cómplice gravemente pisoteado y lamentablemente sucumbió a sus heridas», precisó SANParks, al agregar que un tercer sospechoso resultó herido en el ojo, pero siguió huyendo.

«Ese aún no está arrestado, pero el domingo detuvimos a otros tres sospechosos con un rifle, municiones y un hacha», confirmó este lunes a Efe Phaahla.

«Todavía no se han establecido sus nacionalidades. Se hará tan pronto como comparezcan ante el tribunal», añadió el portavoz.

CAZA FURTIVA

El director del Parque Nacional Kruger, Gareth Coleman, recordó que «la campaña contra la caza furtiva es responsabilidad de todos»; pues «amenaza muchos medios de vida, destruye familias y atrae recursos muy necesarios para combatir el crimen que podrían usarse para crear empleos y desarrollo».

Sucesos de este tipo han acaecido en el pasado. En abril de 2019, a un presunto cazador furtivo de rinocerontes lo pisoteó un elefante; y luego lo devoró una manada de leones en el mismo parque.

Kruger es el parque más extenso de Sudáfrica, cuenta con unos 19.000 animales y acoge la mayor población de rinocerontes y elefantes. Además de constituir un gran atractivo turístico del país, visitado por más de 1,5 millones de personas al año.

Los cazadores furtivos suelen buscan cuernos de rinoceronte, que se venden a elevados precios especialmente en los mercados asiáticos, donde se le atribuyen propiedades curativas y afrodisíacas.

Con información de EFE