Pacientes y funcionarios de diferentes clínicas de diálisis de Guayaquil unieron esfuerzos para reclamar al Gobierno. Se trata de una deuda que no ha cancelado el estado.
En las afueras del gobierno zonal, en la Francisco de Orellana, Guayaquil, se reunieron pacientes, familiares y colaboradores de las clínicas de diálisis.
Ahí, afirmaron que persiste una deuda de alrededor de 160 millones de dólares que el gobierno central no ha pagado a estos centros médicos.
Por ello, algunas clínicas de diálisis han tenido que suspender sus servicios ante la falta de dinero para comprar insumos.
De esta manera, son miles de pacientes que necesitan diálisis que se ven afectados en su calidad de vida.
Paguen, por favor
Cris Freire, vocera de los pacientes y colaboradores de clínicas de diálisis comentó que mes a mes han reclamado por los valores adeudados.
«Lo que ocurre es que se canceló solo tres o cuatro meses. Pero hay dializadoras que no recibieron un centavo. Las autoridades piensan que pueden irse con el gobierno saliente, pero lamentablemente queda una deuda de USD 160 millones», dijo.
«Queremos decirle al señor Guillermo Lasso, que el Gobierno que se va dijo que no puede cumplir la sentencia de la Corte Constitucional a favor de las dializadoras. Necesitamos que se cumpla y que sepa los problemas que hereda respecto a esta deuda», relató Freire.
«3.000 pacientes renales han fallecido por esta situación. Necesitamos que se priorice los recursos para los paciente renales. Su vida pende de un hilo, no tenemos insumos», afirmó.
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