Sudáfrica estima alrededor de 12 millones de contagiados por coronavirus

El Ministerio de Salud de Sudáfrica estima que la cifra real de contagios de COVID-19 en el país, a la espera de los resultados completos de los estudios nacionales de seroprevalencia, ronda los 12 millones (alrededor de un 20 % de la población), pese a que solo se detectaron oficialmente 650.749.

«Los modelos revisados actualmente predicen que hay probablemente unos 12 millones de sudafricanos en total (detectados y no detectados) que se infectaron con coronavirus. Esto se traduce en alrededor del 20 % de la población», señala el Ministerio en su último informe de situación sobre la pandemia.

«Estamos actualmente embarcándonos en un estudio nacional de seroprevalencia que debería dejarnos más cerca de la seroprevalencia real de los anticuerpos del coronavirus y nos dará una indicación más precisa de nuestro estatus de inmunidad nacional», agregan las autoridades sanitarias sudafricanas en el informe.

Sudáfrica con cifras alarmantes

De cumplirse estos cálculos, la cifra real de contagios sería casi 20 veces superior a la de los positivos oficiales, 650.749 hasta la fecha. De estos 15.499 muertes y 579.289 pacientes ya recuperados.

También significaría que Sudáfrica tuvo un enorme número de casos asintomáticos, mayor incluso de lo que se anticipaba al comienzo de la pandemia.

Los cálculos se basan en los estudios parciales de seroprevalencia realizados hasta ahora. Serían una posible explicación al intenso descenso que vino experimentando la curva epidémica en Sudáfrica en las últimas semanas.

Ya en julio, cuando Sudáfrica fue la quinta nación del mundo más golpeada por la COVID-19, se detectó señales de expansión del coronavirus más grandes.

Se espera que esta misma semana el presidente del país, Cyril Ramaphosa, anuncie una flexibilización de las restricciones.

Eso podría implicar, por ejemplo, la reapertura de las fronteras de la nación más industrializada de África tras medio año cerradas.

La nación austral debe ahora buscar caminos para reflotar su economía tras la devastación provocada por las drásticas medidas aplicadas para contener la pandemia.