El Oktoberfest de Múnich reabre tras la alerta de explosivos e incidentes en la ciudad alemana
Por más de ocho horas cerró el Oktoberfest, este miércoles 1 de octubre, tras una alerta de explosivos relacionada con un incendio.

La 190ª edición del ‘Oktoberfest’ quedó oficialmente inaugurada, el sábado 20 de septiembre, en la ciudad de Múnich, Alemania
EFE
Compartir
Actualizada:
01 oct 2025 - 14:12
El Oktoberfest de Múnich, la más multitudinaria fiesta de la cerveza del mundo y que se celebra desde el pasado 20 de septiembre, reabrirá sus puertas este mismo miércoles 1 de octubre del 2025.
Por más de ocho horas cerró el Oktoberfest, tras una alerta de explosivos relacionada con un incendio provocado en el norte de la ciudad, donde hubo dos fallecidos y dos heridos.
"La Policía me ha informado de que, en su opinión, no hay riesgo para continuar con el Oktoberfest. Por eso se reabrirá el recinto (...)", indicó el alcalde de la ciudad, Dieter Reiter, en su cuenta de Instagram.
El vicepresidente de la Policía de Múnich, Christian Huber, confirmó que ha descartado cualquier peligro y por eso se ha dado luz verde a la reapertura a las 17:30 hora local de la Theresienwiese, que acoge cada año esta gran fiesta que visitan a diario decenas de miles de alemanes y turistas.
Un portavoz de la Policía había declarado previamente que 25 perros adiestrados en la detección de explosivos de toda Baviera rastrearon desde las 10: 00 cada rincón del recinto y se activaron los 600 agentes que normalmente trabajan en el Oktoberfest, además de policías federales y 150 policías bávaros adicionales.
La Policía de Múnich explicó que sobre las 04:40 hora local, el Cuerpo de Bomberos fue alertado sobre un incendio en un edificio residencial en el distrito de Lerchenau, en el norte de la capital bávara.
Poco después, también se recibieron informes sobre ruidos de explosiones en el número de emergencia de la Policía, que acudió al lugar y acordonó la zona.
Las primeras investigaciones apuntan a que un hombre de 57 años y de nacionalidad alemana inició un "incendio en el marco de una intensa disputa familiar".
El hombre no contaba con permisos de armas ni de explosivos, pero el sospechoso, que se suicidó, llevaba consigo una mochila que contenía un dispositivo explosivo que debe ser desactivado, según la Policía.
Según el presidente de la Policía de Múnich, Thomas Hampel, la madre del sospechoso, de 81 años, resultó herida, al igual que la hija, de 21 años y de nacionalidad germano-brasileña, a la que los bomberos tuvieron que rescatar desde el primer piso de la casa. El padre del sospechoso, de 90 años, fue hallado muerto en el interior de la vivienda.
El ministro del Interior de Baviera, Joachim Herrmann, recalcó que no hay indicios de un trasfondo radical, sino que el motivo sería "exclusivamente por cuestiones internas familiares".
Cerca del lugar de los hechos se encontró un escrito redactado por el sospechoso, que contenía una amenaza de explosivos no específica relacionada con el Oktoberfest, por lo que se cerró el recinto.
Compartir