El Decreto Ejecutivo 110 firmado este lunes 8 de enero del 2024 por el presidente Daniel Noboa suspende el derecho a la libertad de reunión y a la inviolabilidad de domicilio a escala nacional y en todos los centros de privación de libertad del país. Pero ¿qué implica la restricción de estos derechos?
De acuerdo con el Decreto, la restricción de la libertad de reunión consiste en impedir cualquier acción que afecte la seguridad y el orden público. En ese sentido la Policía y las Fuerzas Armadas pueden impedir y desarticular reuniones en espacios donde se identifiquen posibles amenazas al orden público.
Además, se limitará la conformación de reuniones o de espacios de aglomeración al interior de los centros de privación de libertad y en su perímetro exterior y áreas de influencia. Es decir, no se permitirá, por ejemplo, la concentración de familiares de personas privadas de libertad al exterior de los centros carcelarios.
En tanto, la inviolabilidad de domicilio consiste en la posibilidad de realizar inspecciones y requisas por la Policía Nacional y Fuerzas Armadas para hallar escondites o espacio de almacenamiento de armas o explosivos.
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En el caso de los centros de privación de libertad, también se suspende el derecho a la inviolabilidad de correspondencia. Es decir, que los presos no pueden recibir cartas, mensajes o comunicación en cualquier tipo de soporte sin que hayan sido revisadas previamente por la Policía Nacional o Fuerzas Armadas.
La suspensión de este derecho busca la identificación, análisis y recopilación de mensajes que busquen ocultar el paradero de cualquier privado de libertad o el cometimiento de algún ilícito.
El Decreto Ejecutivo 110 se firmó en el contexto de amotinamientos e incidentes en seis cárceles del país. Estos hechos se dieron luego de la desaparición de Adolfo Macías, alias ‘Fito’, de su celda en la cárcel regional de Guayas.
Fito es uno de los delincuentes más peligrosos del país, líder del grupo delictivo organizado “Los Choneros”. Según el exministro del Interior, José Serrano, Fito se fugó se la cárcel el pasado 25 de diciembre del 2023, mientras salió a una cita médica.
En el Gobierno Nacional aún no se reconoce la fuga. Sin embargo, el presidente Daniel Noboa recalcó este lunes que los amotinamientos en las cárceles se deben a las acciones que se tomó para “recuperar el control de los centros de privación de libertad”.
La restricción de derechos estará vigente por un lapso de 60 días.