El contrabando de combustible y gas en la frontera sur se ha incrementado tras la disminución de precios a la gasolina eco, extra y diésel. El combustible ecuatoriano de contrabando se vende al menudeo en las calles de Aguas Verdes en Perú.
En Aguas Verdes, Perú, ingresan de contrabando decenas de galones de combustible ecuatoriano por la frontera y se venden sin ningún control o cuestionamiento en las calles.
Esta situación también ocurren con el gas. Los contrabandista cruzan por el puente binacional que conecta a Huaquillas y Aguas Verdes, los tanques de gas en bicicletas o en motos.
En Ecuador del precio de los combustibles y el gas están muy por debajo de los que se comercializan en Perú. La rentabilidad que deja esta actividad ilícita lo hace cada vez más atractivo para los contrabandistas, que levantan pasos clandestinos a lo largo de toda la frontera sur.
Esta semana se ha destruido siete pasos clandestinos y tan solo en Huaquillas se han detectado siete casas donde almacenan ilícitamente combustible y gas para el contrabando.
Según expertos, las pérdidas que deja el contrabando al país son millonarias. «El monto del contrabando anual se estima en 800 millones de dólares», indica el experto petrolero Henry Llanes. Dinero que se pierde y que proviene de recursos públicos pero que terminan a merced del contrabando.
Pese a que el parque automotor es bastante reducido en Huaquillas, tan solo de marzo a junio en la estación de Petroecuador en ese cantón se vendieron 2,9 millones de dólares.
Además en marzo de este año, dicha estación vendió cerca de 88 mil galones; mientras que en junio, cuando se anunció la reducción de 15 centavos a las gasolinas eco, extra y diesel, la venta subió a 109 mil galones.
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