Falsos campamentos de verano o promesas de regalos de motocicletas o armas, asĆ como amenazas a padres y profesores, son algunos de los nuevos mĆ©todos de reclutamiento utilizados en Colombia por los grupos armados para sumar niƱos y jĆ³venes a sus filas, informĆ³ este martes la DefensorĆa del Pueblo.
AsĆ lo asegurĆ³ el defensor del Pueblo, Carlos Camargo, al presentar el informe Ā«DinĆ”micas actuales de reclutamiento, uso y utilizaciĆ³n de niƱos, niƱas y adolescentes por parte de grupos armados ilegales o delincuencia organizadaĀ».
En el documento se seƱala la vulnerabilidad de los niƱos y adolescentes, que aumentĆ³ durante la pandemia.
Esto, debido a la deserciĆ³n escolar y fue aprovechado por los grupos armados ilegales para decirles a sus padres que se los iban a llevar por unos dĆas para que no se quedaran en las casas sin hacer nada, a modo de campamento de vacaciones y que despuĆ©s los iban a regresar.
Este mƩtodo ha sido especialmente utilizado por el Clan del Golfo, que buscan tanto a hombres como mujeres de entre 17 y 25 aƱos.
Prometen llevarlos a recibir entrenamiento en campamentos y, posteriormente, permitir que sirvan como milicianos, en las zonas donde residen.
TambiƩn ha habido amenazas a docentes y directivos de establecimientos educativos.
Ā«Lo que resulta mĆ”s grave ante la presencia de grupos ilegales cerca de los colegios y otros entornos protectoresĀ», indicĆ³ la DefensorĆa en un comunicado.
Modo de operar
Estos grupos se aprovechan de los problemas socioeconĆ³micos, agudizados por la pandemia, y engaƱan a los jĆ³venes diciĆ©ndoles que tendrĆan sumas de dinero mensuales.
En algunos casos de hasta un millĆ³n de pesos, o que les regalarĆan motocicletas o armas, entre otros elementos.
Camargo precisĆ³ que en algunos casos involucran sentimentalmente a las vĆctimas, con supuestas novias que los inducen a ingresar a los grupos ilegales.
Ellas los llevan a otros municipios con promesas de trabajo y los inducen al consumo de sustancias psicoactivas, para luego involucrarlos en las actividades de narcotrĆ”fico y la extorsiĆ³n.
En todos estos mĆ©todos Ā«hay una combinaciĆ³n con otras conductas violatorias a los derechos como amenazas, desplazamiento forzado, desplazamientos intraurbanos, secuestro, violencia sexual, explotaciĆ³n sexual comercial, homicidios, desapariciones, tratos inhumanos o degradantes y restricciones a la movilidad en contra de nuestros niƱosĀ», seƱalĆ³ Camargo.
Lugares
La DefensorĆa mostrĆ³ su preocupaciĆ³n por el resguardo Kwes Kiwe Nasa y el asentamiento Pueblo Nuevo, en el Valle del Cauca.
El consejo comunitario Alto Mira y Frontera y algunos resguardos en NariƱo, y en varios resguardos en Amazonas.
Ā«La respuesta al fenĆ³meno del reclutamiento forzado debe incluir programas sociales que faciliten el acceso al empleo, la vivienda digna, la educaciĆ³n, la saludĀ», entre otros, indicĆ³ Camargo.
SeƱalĆ³ que esta es Ā«una forma de ganarle ventaja a los grupos armados que en muchos casos terminan ofreciĆ©ndole a los jĆ³venes alternativas de vida rentablesĀ».