El presidente Daniel Noboa informó que su Gobierno recibió una carta con una “solicitud de paz” de un grupo delictivo organizado. Sin dar nombre, señaló que esto responde a las políticas de seguridad implementadas.
“Hay que ganar batallas. Hemos capturado a líderes de bandas, de las más importantes. De una de ellas, de la cual ya comunicaremos más adelante, hasta hemos recibido una solicitud de acuerdo de paz”, dijo en una entrevista que mantuvo este miércoles 6 de diciembre.
Para él, esta misiva es un indicio de que “bastantes cosas estamos haciendo bien”. También cree que puede responder a que los grupos delictivos “ya no tienen la protección capaz dentro de las fuerzas del orden”. Esto último refiriéndose al reciente cambio que hizo en la cúpula policial y militar.
En el diálogo, que fue transmitido por YouTube, el mandatario señaló que en los próximos días se implementará una política de seguridad en la que se dé a conocer a los fiscales y jueces que trabajen a favor de los grupos delictivos.
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“Hemos de comunicar al pueblo cuáles son los líderes de las bandas y que sientan vergüenza de estar asociados con personas así”, sentenció. Además, mencionó que se cambiarán los medidores de éxito sobre los niveles de inseguridad.
Por ejemplo, dijo que no se contarán las toneladas de droga incautada, sino el número de locales que no han cerrado sus puertas o el control y cambios que se realicen en el sistema penitenciario y la protección que brinde el Estad en las zonas urbano-marginales.
La Penitenciaría del Litoral va a parecer un centro de rehabilitación
El presidente Noboa informó que se implementarán cambios profundos en las cárceles del país, especialmente en la Penitenciaría del Litoral. Según dijo, ese espacio se convertirá en un verdadero centro de rehabilitación social.
También se refirió a la implementación del sistema de barcazas para aislar a los preses de máxima peligrosidad. Este funcionaría mientras se construyen cárceles de máxima seguridad.
Explicó que el gobierno tiene identificadas tres opciones de barcazas que se podrían importar de Estados Unidos, Australia o Reino Unido.
El arribo podría tomar entre siete u ocho meses. Noboa reconoció que la implementación de este sistema “es complejo”, pero “más complejo es tener a todos los líderes en una penitenciaría en el centro de la ciudad más poblada manejando operativos de violencia y de crimen organizado”