¿Cómo nació la tradición de disfrazarse en Halloween?

Halloween se celebra cada año y cada año esta festividad se arraiga más en Ecuador. Ya es usual ver y asistir a eventos, fiestas o rituales alrededor de la fecha más terrorífica del año. Dado que el 31 de octubre está por llegar, cabe recordar su origen y por qué la gente de disfraza este día, especialmente para causar miedo.

¡Muertos vagaban por la tierra!

La festividad se creó en la Europa antigua hace más de 2000 años por la cultura Celta del hemisferio Norte. En aquel entonces Halloween se llamaba ‘Samhain’, palabra que que significaba «el fin de verano») y era parte de una serie de rituales que los celtas hacían con la llegada del invierno y bajo la creencia de que las almas de los muertos vagaban por la tierra.

Octubre era el mes en el que se creía que salían de la oscuridad los fantasmas, muertos, ancestros, brujas y todo tipo de criaturas paranormales, lo que significaba un gran peligro para la humanidad. Durante esos días, los celtas encendían numerosos fuegos para ahuyentarlos e iluminar la fría noche.



Es por esto que se alimenta la necesidad de disfrazarse, pues para esconderse de los malos espíritus, los celtas se vestían con pieles de animales y máscaras con la esperanza de no ser reconocidos como humanos. De acuerdo con National Geographic, “los disfraces también servían de protección contra algunas de las deidades de estos pueblos, que, en ocasiones, también podían jugar bromas a sus adoradores”.

  • Aquí se justifica aún más la frase contemporánea de ‘dulce o truco ¿verdad?

¡Halloween sobrevivió por siglos!

El ‘Samhain’ logró sobrevivir durante los siguientes siglos con la conquista del Imperio Romano por parte de Europa. La religión católica se fue instaurando en las regiones europeas y decidió mezclar algunas creencias de culturas locales, así como apropiarse de diversos rituales paganos.

Los católicos no estaban del todo de acuerdo con el ritual para ahuyentar a los muertos y por ello, en la Italia del siglo XII, el papa Gregorio III designó el 1 de noviembre para honrar a todos los santos.

A la noche previa al evento principal, es decir al 31 de octubre, se conoció como ‘Allhallowe’en’, en escocés, que luego mutó a ‘All Hallows Eve’, en inglés antiguo. En español se traduce como «la noche de todos los santos» y con el tiempo, All Hallow’s Eve se acortó para llamarse Hallowe’en.

Con información de | National Geographic/AS.com