El presidente Donald Trump lanzĆ³ un ataque frontal a la Corte Penal Internacional al autorizar sanciones econĆ³micas y de restricciones de viajes a empleados del tribunal.
Los empleados participan directamente de la investigaciĆ³n a soldados y agentes de inteligencia estadounidenses implicados en posibles crĆmenes de guerra en AfganistĆ”n.
Un alto funcionario del gobierno dijo que la investigaciĆ³n de la CPI viola la soberanĆa nacional estadounidense.
AdemĆ”s, sostuvo que Rusia podrĆa alentar las acusaciones al personal estadounidense.
El funcionario, que hablĆ³ bajo la condiciĆ³n de anonimato, se negĆ³ a dar detalles de la presunta influencia rusa sobre la corte.
El ataque mƔs recientes a orgaizaciones
El decreto presidencial constituye el ataque mĆ”s reciente de este gobierno a las organizaciones, tratados y acuerdos internacionales no alineados con sus polĆticas.
Desde que llegĆ³ al poder, Trump ha denunciado el acuerdo climĆ”tico de ParĆs, el acuerdo nuclear con IrĆ”n y dos tratados de control de armamentos con Rusia.
EEUU se ha retirado
Ha retirado al paĆs del Consejo de Derechos Humanos de la ONU y la UNESCO, amenazado con abandonar la UniĆ³n Postal Internacional y anunciado el fin de la cooperaciĆ³n con la OrganizaciĆ³n Mundial de la Salud.
La corte con sede en La Haya fue creada en 2002 para juzgar crĆmenes de guerra, de lesa humanidad y genocidio. Por ahora 123 estados reconocen su jurisdicciĆ³n.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, denunciĆ³ al tribunal como una ācorte ilegalā que no ha sido eficiente para cumplir su mandato.
Sancionados por investigar a soldados
Dijo que Estados Unidos sancionarƔ a los empleados de la CPI por investigar o juzgar a soldados estadounidenses en AfganistƔn.
TambiĆ©n, por investigar a israelĆes por supuestos abusos contra palestinos.
āNo nos da placer juzgarlosā, dijo Pompeo. āPero no podemos permitir a los funcionarios de la CPI y sus familias venir a Estados Unidos de compras y de viaje y gozar de las libertades estadounidenses al tiempo que persiguen a los defensores de las mismas libertadesā.
El secretario de Defensa, Mark Esper; el de Justicia, William Barr, y el asesor de seguridad nacional Robert OāBrien, quien anunciĆ³ las medidas en el Departamento de Estado, se hicieron eco de las declaraciones de Pompeo.
Barr dijo que investigarĆ” posible corrupciĆ³n en la jerarquĆa de la CPI que segĆŗn Ć©l generaba sospechas de que Rusia y otros adversarios interferirĆan en el proceso de investigaciĆ³n.
Deploran medida del gobierno
Grupos defensores de los derechos humanos deploraron la medida del gobierno.
La medida āallana el camino para imponer sanciones a funcionarios de la Corte Penal Internacional y demuestra desprecio por el estado de derecho globalā, dijo Andrea Prascow, directora en Washington de Human Rights Watch.
āEl asalto a la CPI es un intento de impedir que las vĆctimas de crĆmenes graves, sea en AfganistĆ”n, Israel o Palestina, obtengan justiciaā.
A diferencia de los otros tratados y acuerdos, Estados Unidos nunca ha sido miembro de la CPI.
Gobiernos de ambos partidos temen que soldados y oficiales estadounidenses sean juzgados por presuntos crĆmenes de guerra y delitos atroces.
Mire tambiƩn
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La mayorĆa de los estados miembros se han comprometido a no iniciar esa clase de demandas por temor a perder la ayuda militar y de otro tipo estadounidense.
Pero los fiscales de la CPI se han mostrado dispuestos a investigar a efectivos militares estadounidenses y este aƱo iniciaron una investigaciĆ³n que fue condenada rĆ”pidamente por Washington.
AP